El mandatario mexiquense endureció el discurso frente al presidente Calderón.
Francisco GarfiasElba Esther Gordillo debe haber sentido feo que Enrique Peña Nieto la haya “tapado” en su último Informe de Gobierno. Hubo mención especial para muchos invitados que asistieron al concurrido acto, celebrado en el teatro Morelos, de Toluca, pero de la maestra nada, a pesar de que estaba en primera fila.
En otros tiempos era impensable que el orador principal la ignorara. La afrenta podría resultar costosa. El poder que se desprende de su liderazgo en el sindicato de maestros; aunado al mito de que siempre es ganadora, la hacían aparecer como indispensable para ganar un cargo importante de elección popular.
Pero la vida ha dado muchas vueltas. Ella también ha dado giros de 180 grados que la hacen poco confiable. Incubó su posición al amparo del PRI. Fue secretaria general de ese partido en mancuerna con Roberto Madrazo. Llegó a la coordinación de los diputados tricolores, pero fue depuesta por su alianza con Vicente Fox para subir el IVA.
Supo metérsele al presidente Calderón. Le ayudó, sin el menor pudor, a derrotar a Roberto Madrazo, entonces candidato presidencial del PRI, al que acusó de haberla engañado con acuerdos para hacerla presidenta del partido, que supuestamente no cumplió.
Peña Nieto la tolera, la consiente, la apapacha. Pero es evidente que no considera indispensable el apoyo de quien ha declarado que su “plan A” para la Presidencia es Marcelo Ebrard.
El político mexiquense, puntero en todas las encuestas rumbo a 2012, entrega el gobierno el 15 de septiembre. Se le atraviesa el puente de la Independencia. Fuentes informadas nos aseguran que tiene planeado esperar hasta el lunes 18 para anunciar oficialmente lo que ya sabemos todos: que va por la candidatura presidencial del PRI.
Peña comenzó ya su metamorfosis. Endureció el discurso frente al presidente Calderón. Así va a ser en adelante —ya desprendido de la obligación de ser institucional—, según ha comentado en corto.
Dijo en su mensaje final: “Nos hace falta transitar de una democracia exclusivamente electoral a una democracia de resultados, a un régimen que logre acuerdos… La mejor oferta no es la que condena el pasado, sino la que ve hacia adelante, la que nos convoca a todos (¡ojo en Los Pinos!) a enfrentar los problemas…
“Que no haya confusiones. México tiene un claro proyecto. Está contenido en su Constitución. Lo que hace falta es un Estado eficaz que lo haga realidad…”
“¡Soy nini..!, reviró Luis Videgaray, ex diputado y ex presidente local del PRI, al hacernos notar que ya no es funcionario ni legislador. La expresión del mexiquense nos arrancó una mordaz sonrisa. “Un nini con futuro”, dijimos. “¡Dios te oiga!”, respondió en tono piadoso.
Y no es porque por allí anduviera el polémico obispo Onésimo Cepeda, cuyos bonos han bajado por asuntos más terrenales que celestiales, sino por el deseo de que su jefe, Enrique Peña, mantenga en las urnas, en julio de 2012, la posición de puntero que ha tenido en las encuestas.
No han faltado los brujos-analistas que ya colocan a Videgaray en la Secretaría de Hacienda.
Ya encarrerado, adelantó que no va a regresar a la Cámara de Diputados en este periodo de sesiones, y muy probablemente ni en el que sigue. “Voy a cumplir otras tareas”, añadió, enigmático.
¡¡¡Qué bueno que vino, Manlio!!!, celebró Beatriz Pagés, directora de la revista Siempre! El senador de Sonora es el único competidor que abiertamente tiene Peña Nieto para la candidatura del PRI a la Presidencia de la República. Su discreta posición en las encuestas lo ha llevado a adoptar el discurso de que primero el programa y luego el hombre.
Su presencia en Toluca es señal de que hay disciplina en el tricolor, que el discurso de la unidad se lo toman en serio. Ya probaron, en 2006, lo costoso que resultan las divisiones.
Al Jefe Diego, invitado sorpresa al Informe, no le gusta ni tantito la postura de factotum asumida por Javier Sicilia, en asuntos que van más allá de la defensa de las víctimas del crimen organizado. El polémico panista está consciente de que está de la chingada que te maten a un hijo. “Pero de allí a decidir quién es patriota y quién…”
Fernández de Cevallos no pierde popularidad. Su condición de panista no le impidió ser uno de los personajes más saludados en el acto de Peña. Fue también de los personajes más requeridos para las entrevistas.
* Josefina Vázquez Mota va por un coordinador de campaña “todo terreno”, pero también de tiempo completo. “Alguien que no duerma”, recalcó la todavía diputada federal. En los corrillos se ha mencionado a Ernesto Ruffo, ex gobernador de Baja California, coordinador de estrategia, y a Carlos Medina Plascencia, ex de Guanajuato, quien lleva la plataforma. Ninguno de los dos puede dedicar las 24 horas a las aspiraciones presidenciales de Josefina. El elegido es otro.
Vázquez Mota solicitará, este martes, licencia al cargo de diputada.
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