En la madrugada del pasado 4 de noviembre los hombres del CCOES del Comando General llegaron a la zona de concentración de las 15 aeronaves de la Fuerza Aérea y la Aviación del Ejército que atacaron al máximo jefe de las FARC.
5 minutos después del bombardeo, mientras los comandos eran desplegados en la zona donde estaba Alfonso Cano, los pilotos de la Fuerza Aérea custodiaban a las Fuerzas Especiales e iniciaban los enfrentamientos.
En superficie, mientras algunos soldados buscaban a Cano, una unidad élite del CTI encontraba y analizaba las pertenencias del líder de las FARC.
Cano y sus hombres de confianza tenían fusiles, arneses, equipos médicos, 7 teléfonos Blackberry y 15 celulares con los que se comunicaba la escolta de Cano. Estos equipos fueron interceptados semanas antes por la inteligencia militar.
En el campamento también quedaron munición, armas explosivas, dinero, memorias USB y los rastros del bombardeo. 10 horas después, las tropas evacuaron el área con el arnés que durante los últimos años usó Alfonso Cano, y sus prótesis dentales.
5 minutos después del bombardeo, mientras los comandos eran desplegados en la zona donde estaba Alfonso Cano, los pilotos de la Fuerza Aérea custodiaban a las Fuerzas Especiales e iniciaban los enfrentamientos.
En superficie, mientras algunos soldados buscaban a Cano, una unidad élite del CTI encontraba y analizaba las pertenencias del líder de las FARC.
Cano y sus hombres de confianza tenían fusiles, arneses, equipos médicos, 7 teléfonos Blackberry y 15 celulares con los que se comunicaba la escolta de Cano. Estos equipos fueron interceptados semanas antes por la inteligencia militar.
En el campamento también quedaron munición, armas explosivas, dinero, memorias USB y los rastros del bombardeo. 10 horas después, las tropas evacuaron el área con el arnés que durante los últimos años usó Alfonso Cano, y sus prótesis dentales.
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