La muerte de Chávez y el futuro económico de la Argentina

La muerte de Hugo Chávez

Por Nicolás Litvinoff

Una vez conocida la enfermedad de Hugo Chávez, las especulaciones con respecto a cómo sería el futuro de la región en caso de producirse su muerte comenzaron a circular alrededor del mundo y en los grandes centros financieros.

Apenas unas horas después del fallecimiento del mandatario, el martes pasado, el foco estuvo en el trazado de potenciales escenarios políticos y económicos.
Sabida es la influencia que supo tener Chávez sobre la región en general y nuestro país en particular, y sería necio pensar que los eventos futuros que sucedan en lo inmediato en Venezuela no tendrán peso en nuestra economía, tan atada financieramente a los vaivenes de sus vecinos latinoamericanos.
A continuación, algunas claves para entender lo que puede pasar de aquí en más.

La sucesión: ¿quién es Nicolás Maduro?

Nicolás Maduro, presidente encargado tras el deceso de Chávez, ha sido uno de sus aliados incondicionales en las buenas y en las malas durante los últimos 20 años.
Acusado de radical por algunos analistas venezolanos, fue elegido por el propio Chávez como su sucesor y a él le correspondió dar la noticia de la muerte del comandante.

Video: Así se anunció la muerte de Chávez (TN)

Quienes lo conocen afirman que posee grandes dotes de negociación adquiridas en su vida profesional anterior a convertirse en un líder político (fue un duro sindicalista).
A sus 50 años, antes de ser la cara de Venezuela en el exterior, se ha codeado en la alta política internacional sin complejos a pesar de que no habla otro idioma que el español, algo inédito para un ministro de Exteriores.
Sin pasar por la universidad, trabajó durante varios años como chofer de colectivos antes de comenzar su carrera política.
Conoció a Chávez mientras éste cumplía condena en prisión tras su fallido golpe de Estado en 1992, y esa amistad se fue solidificando hasta convertirse en el hombre que más cerca estuvo del difunto desde conocida su enfermedad hasta su deceso.

¿Cómo se posiciona Capriles?

Henrique Capriles es el punto de referencia de la oposición en Venezuela, y desde que se conoció la enfermedad de Chávez varios analistas políticos afirman que su imagen cobró relevancia.
De todas maneras, será difícil que pueda capitalizar la muerte del mandamás venezolano. La experiencia reciente en este tipo de casos es justamente la contraria: pasó en la Argentina cuando, con la muerte de Néstor Kirchner, Cristina Kirchner logró una cantidad de votos impensados tiempo atrás, como si de alguna manera los ciudadanos tendiesen a "honrar" la memoria del muerto reforzando los lazos con el oficialismo.
El oficialismo venezolano ha logrado que las elecciones se lleven a cabo en muy poco tiempo de manera de capitalizar la simpatía de gran parte del electorado por el difunto Chávez.
Los analistas políticos afirman que Maduro vería allanado el camino hacia la presidencia del país y, con él, la profundización del modelo.

Los bonos venezolanos

Las dudas sobre quién será el próximo presidente de Venezuela se disiparán el próximo 14 de abril, fecha en la que se llevarán a cabo las elecciones.
Si buscamos alguna señal en el mercado financiero, podemos observar que los bonos emitidos por el gobierno venezolano y por la petrolera Pdvsa (en manos del Estado) cayeron en los Estados Unidos luego de conocida la noticia del fallecimiento de Chávez.
Esta tendencia podría revertirse en el mediano plazo, ya que lo que sucedió es una reacción lógica de los inversores: se sabe que los capitales son reacios a la incertidumbre, y hasta que no se defina el rumbo político que tomará el país pareciera que la recomendación es wait and see (esperar y ver que pasa).
No se cree que, sea quien sea el próximo presidente, se tomen decisiones que afecten la deuda emitida o a sus tenedores, ya que eso sería un suicidio financiero que no tiene por qué suceder.
Pero de todas maneras, los mercados continuarán expectantes a lo que ocurra de aquí en más.

¿Qué puede pasar con la Argentina y con la región?

Es indiscutible la influencia que tuvo Chávez en la región en la última década. El venezolano siempre fue uno de los líderes más escuchados y, gracias a su abultada billetera proveniente de los "petrodólares", uno de los más requeridos para asistencias y negocios varios.
La Argentina, al igual que otros países, ha sido muy permeable a la bajada de línea del líder bolivariano. La centralización de la economía, la política cambiaria y de control por parte del Estado fueron de alguna manera "importadas" desde Venezuela.
¿Buscará la moderación Nicolás Maduro al no tener el soporte político que sí tenía Chávez? ¿O, por el contrario, esa situación lo hará radicalizarse apalancándose en el fuerte ajuste económico hecho hace pocas semanas con la devaluación de la moneda local en casi un 50%?
En ese sentido, en caso de que Maduro proponga una radicalización del modelo (más expropiaciones, más incidencia del Estado en la economía y más presión sobre los exportadores y generadores de divisas) podría pensarse que la Argentina, en caso de continuar el kirchnerismo al frente del gobierno a partir de 2014, contará con un socio capitalista para seguir adelante con reformas de fondo (el famoso "vamos por todo").
En lo inmediato, aquellos que esperaban transformaciones bruscas en la región y un Capriles que lidere un cambio de rumbo político y económico con origen en Venezuela deberán esperar un poco: nada parece indicar que ello vaya suceder en el corto plazo.