12 abril, 2013

La mesa de tres patas

Francisco Garfias
Madero comparó con esto el famoso pacto que el PAN suscribió inicialmente con el PRI gobierno y el PRD. 
La mesa  de tres patas
Gustavo Madero fue a meterse ayer a la madriguera de los calderonistas (el Senado de la República) para darles su punto de vista sobre la importancia que, a su juicio, tiene el Pacto por México para la gobernabilidad y el desarrollo en este país.
Comparó el famoso pacto que el PAN suscribió inicialmente con el PRI gobierno y el PRD, con una “mesa de tres patas” (al PVEM ni lo peló).


Si una de esas patas se desgasta, el proyecto se viene abajo y la gobernabilidad quedaría en entredicho, advirtió el jefe nacional del PAN, según el relato que de ese encuentro nos hizo el senador Ernesto Ruffo, ex gobernador de Baja California.
La debilidad con la que Enrique Peña llegó a la Presidencia de la República lo obliga a apoyarse en los partidos de oposición para hacer su trabajo. El priista logró apenas 38% de los votos. “No constituye una base sólida para gobernar”, dijo el senador por Baja California.
Ya encarrerado, pidió el apoyo para la política de oposición constructiva que puso en marcha el cuestionado Madero. “El Pacto está funcionado. Ya produjo algunas reformas. En materia de telecomunicaciones tenemos acuerdos en 80% de la iniciativa”.
“Hay que apoyar. No ser mezquinos. No podemos poner en riesgo al país. Tenemos que ser responsables. Ser Presidente de México es ser Presidente de México”, recalcó.
Pero dijo que Peña Nieto tiene que poner lo suyo. Si empieza a ser presidente del PRI —“estoy preocupado por el cargo que le dieron en el partido”— también se desbalancea “la mesa de tres patas”.
El jefe nacional estuvo con los senadores del PAN aproximadamente dos horas.
Ruffo, además, nos contó sobre el encuentro que cinco ex gobernadores del PAN —Carlos Medina, Alberto Cárdenas, Fernando Canales, Fernando Elizondo y él mismo—sostuvieron, por separado, con Madero.
Le dejaron bien clarito que el Movimiento de Renovación Ideológica que formaron no debe verse como una corriente ni como un reto a la institucionalidad. “Queremos poner nuestra experiencia al servicio del PAN ciudadano frente al PAN burócrata”, dijo.
Los ex gobernadores “de la primera generación” —así los llaman— le pidieron también que no se juegue con la idea de suprimir la voluntad soberana de la Asamblea Nacional del PAN de elegir en forma directa al nuevo jefe nacional.
El de Baja California sabe de los riesgos que implica meterse a una elección directa del dirigente del partido. La reacción de la Asamblea de dar el madruguete con esa bomba la explica Ruffo como un “enojo” contra el CEN por el “manoseo” y la “burocratización” que sufrió el Consejo Nacional, órgano que hasta ahora había elegido al mero mero del partido.
“El PAN burócrata nos comió lozanía y honestidad”. Puntualizó.
Fernando Rodríguez Doval es miembro de la comisión especial encargada de armonizar los estatutos con la decisión de la Asamblea del PAN de elegir al jefe nacional en elecciones directas. No lo dice abiertamente, pero es evidente que el diputado federal sabe que la “democrática” medida mete a su partido en un berenjenal.
Ya detectó cuatro riesgos mayores que obligarán al PAN a blindar sus elecciones internas: la intervención de los gobernadores, acarreos y movilizaciones, compra de votos y afiliaciones masivas.
Acción Nacional tiene que pasar por esa etapa de elecciones directas. Ya no hay marcha atrás. Nadie se atreverá a oponerse a la militancia. Pero lo hace lustros después de que el PRI y el PRD desecharan el método por disfuncional. En el experimento van a perder años. También tendrán que recular. Ya lo verá.
■Las grillas al interior de los partidos impactan de lleno el trabajo en las cámaras del Congreso. Diputados y senadores parecen habitar la Torre de Babel. No se entienden. La última discrepancia es la ley que regula la deuda en los estados y municipios. Ayer la dictaminó el Senado en la Comisión de Puntos Constitucionales.
En San Lázaro se apoyan en el artículo 72 de la Carta Magna para señalar que el Senado no puede ser cámara de origen en una ley o decreto que verse sobre empréstitos. “Primero deberá ser discutida y aprobada en Diputados, como cámara de origen, para luego pasar a la de Senadores, la cual fungirá como cámara revisora”, dice un oficio de la Dirección General de Asuntos Jurídicos en San Lázaro, dirigido a los diputados del PRD Trinidad Morales Vargas y Carol Antonio Altamirano.
En el Senado replican con el argumento de que la mencionada ley lleva modificaciones constitucionales y que eso les permite ser cámara de origen.
Francisco Arroyo, presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, dice que Ángel Heladio Aguirre anda enojado “porque dice que le eché el caballo”. Y es que el diputado del PRI declaró que Guerrero —donde hay una insurrección de maestros respaldada por las llamadas policías comunitarias— es un “Estado fallido” y que el gobernador debe rendir cuentas de la situación en su estado. Arroyo, es cierto, no le echó el caballo. Le aventó un tráiler.
Le preguntamos al diputado del PRI si el mandatario estatal le hizo algún tipo de reclamo directo. “Tenemos vasos comunicantes”, subrayó el priista guanajuatense.
En el gobierno de Guerrero, por cierto, traen su versión sobre “la mano que mece la cuna” en el conflicto de los maestros disidentes. “Son amigos priistas interesados en tirar al gobernador, los mismos que atizaron a los de Ayotzinapa”, nos aseguran.
La reacción en el PRI no se hizo esperar. “Ya le quieren echar la culpa a Rubén Figueroa. Lo quieren hacer el padre de todos los males. Eso es una mamada de King Kong”, nos dijo un diputado federal del tricolor.

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