Yuriria Sierra
Luz María Beristain decía que pedirá la creación de una
fiscalía especial que persiga las agresiones que sufren los políticos.
Pasémosle lista, por orden de aparición, a estos personajes (des)honrosísimos miembros de la clase política nacional:
Familia Granier... ¡Presente! O, bueno, ni tanto, pues apenas hoy sabremos si el ex gobernador asistirá al llamado que le hizo la Procuraduría de Tabasco y, ya estando ahí, a ver si responde por su ex tesorero. Aunque por lo pronto, carga ya también a cuestas los cinco predios que el Servicio de Administración Tributaria aseguró en la capital del estado. Cinco terrenos cuyo valor de cada uno oscila en tres millones de pesos. Uno de estos predios está a nombre de Mariana Granier Calles, hija del ex gobernador. Y si eso no parece raro, dirá usted, y es que el decomiso de estos predios se da como consecuencia de una alerta que activaron las autoridades hacendarias, después de ubicar un depósito por cerca de 14 millones de pesos —en efectivo— en una de las cuentas de la familia Granier. Movimiento nada discreto ni afortunado cuando sobre el ex gobernador hay señalamientos y acusaciones de desfalco de los recursos del estado.
Luz María Beristain... ¡Presente! O, también, más o menos, porque mejor dicho es ausente, ocupa el cuarto lugar de la nada honrosa lista de los senadores que más faltan a las sesiones en el pleno. Pero ella ayer decía que pedirá la creación de una fiscalía especial que persiga las agresiones que sufren los políticos. No, no es broma. Lo dijo en el momento de “sensatez”, que le siguió al videoescándalo que protagoniza, donde agrede y se ufana de ser una “autoridad” con la empleada de una aerolínea. Y es que, cómo es posible que se le haya puesto el mote de #LadydelSenado, si ella lo único que quería era abordar su vuelo a Cancún para ir en busca de apoyo, de recursos para los programas que está impulsando, mismos que, misteriosamente, no aparecen en ninguna iniciativa que lleve su nombre, porque simplemente no ha presentado una sola desde que tomó posesión de su curul. La senadora, en conferencia de prensa, adelantaba que le parece injusto que se le señale por estos episodios que, a su parecer, sólo fue una reacción de “mujer valiente”.
Y, finalmente, Ulises Ramírez... ¡Presente! ¡Y millonario! Pues resulta que el líder de los panistas en la Cámara de Diputados del Estado de México hizo un negociazo con las candidaturas a diputaciones federales, vendiéndolas en un millón de pesos cada una. Una investigación realizada por mi compañero Raúl Flores dio también con propiedades del panista que oscilan juntas en más de 50 millones de pesos, incluso con una avioneta con un costo de 600 mil dólares. Está bien que ser legislador deje dinero (y no lo vayan a negar), pero ¿alcanza su sueldo para estos lujos)?, y es que también se encontró con gastos mensuales de 90 mil, nada más en gimnasios y alimentos. A esto se le suman sus otros gustitos, automóviles de marcas como: Jaguar, BMW o Porsche... y, ¿por qué no?, una que otra obra de arte para adornar su casa: un Botero, un Frida Kahlo.
“El partido no está para estas cosas...”, me decía ayer, Homero Niño de Rivera, diputado federal de Acción Nacional. Y tiene razón, tan partido que se ve al interior, como para que algunos de sus miembros lo terminen de partir más.
Familia Granier... ¡Presente! O, bueno, ni tanto, pues apenas hoy sabremos si el ex gobernador asistirá al llamado que le hizo la Procuraduría de Tabasco y, ya estando ahí, a ver si responde por su ex tesorero. Aunque por lo pronto, carga ya también a cuestas los cinco predios que el Servicio de Administración Tributaria aseguró en la capital del estado. Cinco terrenos cuyo valor de cada uno oscila en tres millones de pesos. Uno de estos predios está a nombre de Mariana Granier Calles, hija del ex gobernador. Y si eso no parece raro, dirá usted, y es que el decomiso de estos predios se da como consecuencia de una alerta que activaron las autoridades hacendarias, después de ubicar un depósito por cerca de 14 millones de pesos —en efectivo— en una de las cuentas de la familia Granier. Movimiento nada discreto ni afortunado cuando sobre el ex gobernador hay señalamientos y acusaciones de desfalco de los recursos del estado.
Luz María Beristain... ¡Presente! O, también, más o menos, porque mejor dicho es ausente, ocupa el cuarto lugar de la nada honrosa lista de los senadores que más faltan a las sesiones en el pleno. Pero ella ayer decía que pedirá la creación de una fiscalía especial que persiga las agresiones que sufren los políticos. No, no es broma. Lo dijo en el momento de “sensatez”, que le siguió al videoescándalo que protagoniza, donde agrede y se ufana de ser una “autoridad” con la empleada de una aerolínea. Y es que, cómo es posible que se le haya puesto el mote de #LadydelSenado, si ella lo único que quería era abordar su vuelo a Cancún para ir en busca de apoyo, de recursos para los programas que está impulsando, mismos que, misteriosamente, no aparecen en ninguna iniciativa que lleve su nombre, porque simplemente no ha presentado una sola desde que tomó posesión de su curul. La senadora, en conferencia de prensa, adelantaba que le parece injusto que se le señale por estos episodios que, a su parecer, sólo fue una reacción de “mujer valiente”.
Y, finalmente, Ulises Ramírez... ¡Presente! ¡Y millonario! Pues resulta que el líder de los panistas en la Cámara de Diputados del Estado de México hizo un negociazo con las candidaturas a diputaciones federales, vendiéndolas en un millón de pesos cada una. Una investigación realizada por mi compañero Raúl Flores dio también con propiedades del panista que oscilan juntas en más de 50 millones de pesos, incluso con una avioneta con un costo de 600 mil dólares. Está bien que ser legislador deje dinero (y no lo vayan a negar), pero ¿alcanza su sueldo para estos lujos)?, y es que también se encontró con gastos mensuales de 90 mil, nada más en gimnasios y alimentos. A esto se le suman sus otros gustitos, automóviles de marcas como: Jaguar, BMW o Porsche... y, ¿por qué no?, una que otra obra de arte para adornar su casa: un Botero, un Frida Kahlo.
“El partido no está para estas cosas...”, me decía ayer, Homero Niño de Rivera, diputado federal de Acción Nacional. Y tiene razón, tan partido que se ve al interior, como para que algunos de sus miembros lo terminen de partir más.
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