¿Qué pasará con el PAN si pierde BC?
Federico Berrueto
El debate de candidatos en Baja California del miércoles pasado revela
que el PAN está en serios apuros. Las encuestas indican que la
coalición del PRI lo está superando, su campaña negra en tv ha sido frenada por
la autoridad electoral y, por si fuera poco, el debate muestra que
el candidato Vega no era el indicado para ese desafío. El PAN se
equivocó.
Si
hubiera escogido a Héctor Osuna, el PRI estaría en dificultades. Se impuso a Kiko Vega,
quizás como concesión al PRD, el que ganó posiciones como la candidatura
municipal en Ensenada, plaza que el PAN hubiera ganado con facilidad y que va
abajo por 15 puntos.
Madero debió haber intervenido, la dejó pasar y ahora actúa
precipitadamente junto con Zambrano para evitar una derrota que le resultaría
desastrosa.
Aunque no lo sepa, Madero nunca ha tenido posibilidad de
reelegirse, su tarea es preparar al PAN para iniciar una nueva etapa ajena
a él y al calderonismo; ha cumplido su misión más importante: frenar a Calderón
en el PAN y en el Senado.
Con o sin Baja California, Madero saldrá del PAN una vez que
concluya su mandato en diciembre.
La derrota de Baja California no sería de Madero, tampoco del
gobernador José Guadalupe Osuna, quien concluye gestión de
manera favorable y con reconocimiento de todos,
incluyendo de sus adversarios.
La derrota es la continuidad de lo
que ha sucedido en León, Jalisco, Morelos, Tlaxcala y en casi todo el país en
la elección pasada. Es la misma causa: el desgaste por el mal
gobierno nacional y la pérdida del proyecto ciudadano que llevó al PAN al
poder.
El PAN tiene escasas vías para revertir la adversidad en la elección.
Puede insistir en prácticas contrarias a lo que está exigiendo, como obligar al
gobernador Osuna a intervenir en la elección; recurrir a la cooptación de la
estructura electoral del opositor; también inventar un escándalo en los últimos
días de campaña, como lo ha hecho en otros lugares, o
apostar como AMLO, que la protesta dé lo que no dieron las urnas.
En el intento, el PAN puede perder mucho más que la
elección y profundizar las causas originarias de su crisis.
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