11 marzo, 2008

Chávez, las FARC y la UNAM
Godofredo Rivera




El conflicto reciente entre Colombia y Ecuador pone de relieve el serio peligro que para la región representa Hugo Chávez. Tradicionalmente, EU ha minimizado el peligro que representa el gorila rojo, pero eso es un grave, grave error. Chávez es una bomba de tiempo y si EU y sus socios latinoamericanos no se ponen las pilas, les reventará en las manos.

Ya en la OEA están señalando al Presidente Uribe como el causante de la crisis diplomática. Perdón, pero es al revés. Al parecer hay evidencia de que quien hizo la llamada para que el ejército colombiano acudiera a la frontera ecuatoriana fue el propio Hugo Chávez. No me sorprendería, pues una táctica guerrillera marxista leninista es provocar el asesinato intencionado aún traicionando a aliados con el fin de crear un gran conflicto. Lo cierto es que desde hace algún tiempo la guerrilla colombiana ha encontrado un verdadero santuario en Ecuador, por lo que el ejército colombiano ha tenido que realizar varios enfrentamientos en la frontera con ese país.

El grupo guerrillero colombiano llamado las FARC en los últimos años ha evolucionado y se ha aliado a narcotraficantes (durante mucho tiempo las FARC pudieron sobrevivir gracias al apoyo financiero de los narcotraficantes). Pero ojo, no ha abandonado sus ideales marxistas leninistas. Desde hace 50 años este grupo ha secuestrado y asesinado a miles de colombianos por tratar de imponer su “dictadura del proletariado.” Hoy prosigue esa intención. Sin embargo, en años recientes el gobierno colombiano ha mermado las fuerzas de los guerrilleros, en particular en el período del Presidente Uribe.

¿Qué ha resucitado a este grupo últimamente? Sencillo, el apoyo financiero de Hugo Chávez, que hace lo que quiere con el dinero ganado por la venta de petróleo. Asimismo, la simpatía a las FARC del otro aspirante a dictador, Rafael Correa, ha facilitado que la guerrilla encuentre refugio en la frontera ecuatoriana.

¿Qué impacto tienen estos acontecimientos en México? Muy serio. Desde hace varios años hay grupos radicales marxistas leninistas enclaustrados en algunas facultades de universidades públicas como la UNAM. No, no se trata de que las autoridades de dicha institución estén en complicidad con los individuos de estas agrupaciones. De hecho, la propia UNAM ha sido víctima en varias ocasiones de las agresiones de estos radicales.

¿Entonces por qué han encontrado cobijo los radicales de izquierda en instituciones como la UNAM? Sencillo, desde hace ya varias décadas en esta institución se enseña marxismo en la mayoría de las facultades de ciencias sociales (filosofía y letras, economía, Ciencias políticas, etc.). La mayoría de esta enseñanza es “marxismo académico” y no consiste en hacer llamados a la insurgencia. Pero ojo, hay una serie de profesores charlatanes radicales (aliados y/o simpatizantes con agrupaciones radicales de izquierda nacionales y extranjeras externas a la UNAM) que viven del presupuesto público (si rindieran cuentas al mercado ya habrían desaparecido) y que continúan enseñando y envenenado a los jóvenes universitarios. Les enseñan que la libertad humana sólo se alcanza a través del marxismo leninismo, que los pobres existen porque los ricos los explotan, que EU y sus trasnacionales se quieren apoderar del país, que los millones de muertos bajo los regímenes comunistas son datos inventados por el imperialismo yanqui, que el único factor productivo que debe existir es el trabajo, que el capitalismo es el sistema más nefasto que pueda existir, que Fidel Castro es el más grande estadista de América Latina, que Cuba tiene un gran sistema educativo, y así podría seguir enumerando una mentira tras otra de estos grupos que encuentran aceptación en jóvenes poco analíticos y con debilidades emocionales. Por fortuna, aún sigue siendo una minoría de jóvenes, pero cuidado con que crezca su número. Estrictamente hablando, un joven adoctrinado, es una vida humana productiva perdida.

Pero esto no sólo se circunscribe a la enseñanza superior. En México en varias normales de estados como Oaxaca y Guerrero, lo “maestros” les enseñan a los niños marxismo ramplón y se les adoctrina para la insurgencia. Esto es más grave, pues los niños aún no se forman un criterio.

En América Latina la situación es similar, y en algunos casos peor, pues las mismas autoridades académicas fomentan la insurgencia. No debe sorprendernos pues que en América Latina las guerrillas proliferen. La causa no es la pobreza, sino el nefasto sistema educativo de todos los niveles que no educa, sólo adoctrina bajo el eje marxista leninista.

En México basta con acudir a las facultades y escuelas arriba referidas para ver pegados en muros, puertas, pizarrones, anuncios que invitan a los jóvenes para que se agrupen a organizaciones radicales, de diversos nombres como “Agrupación maoísta de jóvenes,” “Grupo espartaco de México,” “Frente marxista leninista por la libertad,” etc.

Estas agrupaciones extremistas habían estado apagadas, pero en los últimos años han resurgido peligrosamente. A mí no me queda la menor duda, ahí está la mano de Chávez y de terroristas como las FARC. ¿Sorprende que haya jóvenes mexicanos involucrados -y hoy algunos muertos- con los terroristas de las FARC? En lo absoluto, fueron adoctrinados y enrolados por estas agrupaciones desde México y luego enviados a entrenamientos más profundos a Colombia, hacia la selva en donde opera la guerrilla. El objetivo: que regresen a México a emprender la revolución marxista leninista.

Definitivo, México requiere una urgente reforma educativa que escude a los jóvenes de organizaciones extremistas, esas que no reconocen que el comunismo sólo trajo pobreza y asesinatos.

El Presidente Calderón hace bien en no caer en entrar en pleito con Chávez, pero debe guardar su distancia, pues el gorila rojo está operando bajo el agua, envenenando a jóvenes mexicanos. No sé por qué el sistema de inteligencia del gobierno mexicano no se ha infiltrado en las agrupaciones radicales que desde instituciones como la UNAM hacen propaganda comunista. A quien esto escribe no le queda la menor duda de que las FARC y Chávez, además de reclutar a jóvenes mexicanos, también han asesorado a organismos terroristas como el EPR. Sólo hay que ver como el EPR pasó de poner “bombitas caseras” que sólo rompían los vidrios de algunos bancos, a diseñar verdaderos explosivos para volar kilómetros de gasoductos.

Cuidado gobierno mexicano, los grupos radicales están intensamente operando en México (bueno, han operado desde hace varios años, pero hoy están reviviendo) y sus intenciones no son nada buenas. A Chávez sólo le interesa golpear a lo que él considera “democracias de derecha” y no escatimará esfuerzo alguno para expandir su revolución bolivariana.

Hoy más que nunca es necesario que los políticos en Washington apoyen a Colombia y aprueben un tratado de libre comercio con esa nación. Ya EU ha apoyado en logística militar a Colombia, pero es necesario intensificar las relaciones comerciales y la asesoría en materia de combate al narco-terrorismo. Por lo pronto, el Presidente colombiano Álvaro Uribe parece estar sólo en Latinoamérica, pero no lo está, habemos millones de latinoamericanos que lo apoyamos en lucha contra el Eje del mal, ese formado por los gobiernos de Venezuela, Bolivia y Ecuador. Más acercamiento a Colombia, Presidente Calderón, y menos a Venezuela y Cuba.

No hay comentarios.: