01 junio, 2011

Quién es quién en la oposición siria

Internacional

Quién es quién en la oposición siria

Representantes de grupos contrarios al régimen de Assad celebran un multitudinario congreso en Turquía


La Conferencia «Cambio en Siria», que se celebra estos días en la ciudad turca de Antalya, reúne a más de trescientos delegados de diversos grupos opositores sirios, que intentan planificar una «hoja de ruta» para el futuro de ese país. El congreso coincide con la amnistía general decretada ayer por el presidente sirio Bashar El Assad para todos los presos políticos, una medida que los grupos opositores consideran «insuficiente».

El evento ha sido organizado por la Organización Nacional para los Derechos Humanos, una de las más conocidas asociaciones de disidentes sirios, y financiada por tres hombres de negocios, Ammar Qurabi, líder de esta organización, y los hermanos Ali y Wassim Sanqar. «La inclusión de empresarios es un paso significativo. La comunidad de negocios está dándose cuenta lentamente de la necesidad de apoyar el futuro de Siria», ha dicho Ammar Abdulhamid, presidente de la Fundación Tharwa, un «think tank» con base en Washington destinado a promover la democracia en Siria.

Pero ¿quién es quién en el movimiento de contestación sirio? Las principales plataformas de oposición son dos. La primera, el Frente de Salvación Nacional, creado por Abdulhalim Haddam, un antiguo asistente de Bachar El Assad que se pasó a la oposición, fue establecida en Bruselas hace unos años por diversos grupos nacionalistas y liberales y la Hermandad Musulmana, si bien ésta la abandonó en 2009.

La otra, el Movimiento por la Justicia y el Desarrollo en Siria, está formada por los grupos opositores que firmaron la llamada «Declaración de Damasco», un documento hecho público en 2005 que llama a una «reforma pacífica y gradual» del «régimen autoritario y totalitario», y que supuso penas de prisión para doce de sus signatarios. Uno de ellos, el hombre de negocios y antiguo parlamentario Riad Seif, volvió a ser arrestado por la policía siria el pasado 6 de mayo. Piden, además de la amnistía concedida ayer por Assad, que se levante el estado de emergencia, el regreso de los exiliados y la formación de partidos políticos.

Este grupo ha sido uno de los principales promotores de la conferencia. «No tenemos más alternativa que el cambio. El régimen actual no puede ser reformado», ha declarado Enes Al Abda, secretario general del Consejo Nacional de la Declaración de Damasco.

Hoja de ruta

Los Hermanos Musulmanes tienen una importante presencia en el congreso, a pesar de pasadas diferencias con otros partidos de oposición. Fueron parte del Frente de Salvación Nacional hasta 2009, cuando el bombardeo israelí de Gaza llevó a la organización islamista a renunciar a oponerse al gobierno de Assad. No obstante, la cruel represión de las protestas de estas semanas ha llevado a sus miembros a sumarse a la conferencia.

«El objetivo es establecer una hoja de ruta para liberar Siria de la opresión y apoyar la revolución por la libertad y la democracia», dice Moulhem Droubi, miembro del consejo gobernante de la Hermandad Musulmana. «Assad no es la persona adecuada para gobernar Siria», asegura.

Según Droubi, la conferencia no pretende crear un consejo de transición similar al establecido por los rebeldes libios, debido al riesgo de nombrar disidentes que siguen activos en Siria y han enviado representantes al congreso. «Aquí en Antalya, nadie, ni siquiera la Hermandad Musulmana, afirma estar en las protestas callejeras», dice.

Participación de minorías

También las minorías están representadas en la conferencia. Más de sesenta de los delegados son kurdos, que en Siria se agrupan en el Partido por la Modernidad y la Democracia, y el más veterano Partido Democrático Kurdo Unido, ambos ilegales. Aunque ambos partidos coinciden en luchar por un reconocimiento de los derechos culturales de los kurdos en Siria y una mayor democratización, este último es considerado una extensión del PDK iraquí de Yalal Talabani. No obstante, algunos delegados se han quejado de que los grupos kurdos están «boicoteando la conferencia».

Participa asimismo la Liga Cristiana Asiria, cuyo portavoz, Jean Antar, asegura que la presencia de delegados de diferentes sectas y etnias desmiente la afirmación del gobierno de que sólo Assad, que pertenece a la minoría alauí, puede proteger la diversidad. «Más y más gente se está dando cuenta de que el régimen está enfrentando a unas minorías contra otras para que le ayuden a sobrevivir», asegura Antar. Otros grupos izquierdistas y nacionalistas también han enviado representantes al congreso.

No obstante, las divisiones hacen temer el fracaso de la reunión. Ribal El Assad, que preside la Organización por la Democracia y el Cambio, con base en Londres, ha dicho que la conferencia «es un frente para el extremismo islámico». Ribal es hijo de Rifat El Assad, tío del presidente Bashar, que en 1982 dirigió la masacre de 20.000 islamistas en la ciudad de Hama y que posteriormente cayó en desgracia al intentar dar un golpe de estado contra su hermano, el entonces presidente Hafez El Assad. «Puedo asegurarle que ninguna de estas personas representa a la oposición siria. Sólo se representan a sí mismos», ha asegurado en declaraciones que recoge el diario «The Guardian».

Destino, La Haya

No obstante, el activista Raduán Ziadeh, de la Iniciativa Nacional por el Cambio, asegura que la conferencia representa tanto a grupos seculares como islamistas moderados. «Todos sabemos que la sociedad siria es muy conservadora. Los musulmanes moderados deben estar presentes», afirma. «El levantamiento sirio no tiene liderazgo. Necesitamos establecer algún tipo de equilibrio para seguir adelante», ha dicho.

Por encima de todo, destaca el patriotismo: suena el himno sirio al inicio de las sesiones, y algunos delegados enarbolan banderas verdes, blancas y negras, la enseña de Siria antes de la llegada del Partido Baath. Al final, un cántico que entonan casi todos: «Bashar, tu destino será La Haya», en referencia al Tribunal Penal Internacional.

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