TÚNEZ, 15 agosto 2011 (AFP) - Rebeldes libios y representantes del régimen de Muamar Gadafi se reunieron en secreto en Djerba, una isla del sur de Túnez cercana a Libia, en cuyo aeropuerto había aparcados aparatos sudafricanos y qataríes el lunes, informaron varias fuentes.
“Las conversaciones se desarrollaron la pasada noche en un hotel bajo mucha vigilancia”, dijo a la AFP una fuente, que pidió el anonimato, próxima a los servicios de seguridad tunecinos.
Varios “cortejos de coches escoltados pasaron la frontera el domingo en Ras Jedir, cerca de Djerba”, añadió la fuente, quien aseguró que en la reunión estuvieron ministros y responsables de seguridad del régimen libio, aunque no facilitó sus nombres.
Por otra parte, un avión trimotor sudafricano estaba aparcado el lunes en el aeropuerto, junto a dos helicópteros militares qataríes, reveló a la AFP una fuente aeroportuaria.
La noche del domingo al lunes se registraron enfrentamientos entre seguidores de Gadafi y tunecinos cerca de Ras Jedir, quienes alcanzaron el punto fronterizo con vehículos todoterreno, mientras partidarios de la rebelión celebraban “el final” del líder libio, explicaron a la AFP varios ciudadanos.
Libia: los rebeldes avanzan al Oeste pero Gadafi se mantiene inflexible
El coronel Muamar Gadafi desafió de nuevo a los rebeldes y a la Otan el lunes, en un momento en el que los insurgentes capturaron dos ciudades clave en la carretera hacia Trípoli, en uno de los avances más importantes desde el inicio del conflicto hace seis meses.
Gadafi emitió su mensaje sonoro de madrugada “en directo”, según la televisión libia, cuando unos rumores se propagaron a través de las redes sociales y en algunos medios sobre una salida inminente hacia el extranjero del disputado dirigente libio, en el poder desde hace 42 años.
“El final del colonizador está cerca y el final de las ratas está cerca. (Los rebeldes) huyen de una casa a otra, ante las masas que los echan”, dijo Gadafi.
“Al colonizador y sus agentes sólo les queda recurrir a la mentira y la guerra psicológica, después de que fracasaran todas las guerras con todas las armas”, agregó.
El líder libio, que sigue al mando pese a la campaña militar de la Otan, el aislamiento y las sanciones internacionales, animó a sus partidarios a resistir y a “prepararse para la batalla para liberar” las ciudades en manos de los rebeldes.
La televisión oficial difundió también imágenes “en directo” de la Plaza Verde, en el centro de Trípoli, donde cientos de simpatizantes del régimen estaban reunidos, luciendo retratos de Gadafi.
Los rebeldes por su parte indicaron que controlan las ciudades de Garián y de Sorman, situadas respectivamente a 50 km al sur de Trípoli y a unos 70 km al oeste, acercándose así más a la capital, bastión del régimen Gadafi.
La rebelión tiene también el “control total” de los 15 km de ruta entre las ciudades costeras de Zauiya y de Sorman, lo cual priva a Trípoli de su habitual vía de suministro desde Túnez, declaró a la AFP un portavoz de los insurgentes. Zauiya se encuentra a unos 40 km de la capital.
Sin embargo, los rebeldes se enfrentaron a una fuerte resistencia en Zauiya. Aunque mantienen el control de las entradas sur y oeste de la ciudad, no han podido progresar mucho. Se registraron violentos combates, y los pro-Gadafi bombardearon los barrios tomados por los rebeldes.
En total, en los tres frentes, 12 rebeldes murieron el domingo y decenas resultaron heridos, y 52 soldados del coronel Gadafi fueron capturados, afirmó la rebelión.
En Trípoli, el portavoz del régimen, Musa Ibrahim, reconoció que los rebeldes habían entrado en Garián. “Pero nada nos hace preocuparnos”, dijo, afirmando que el régimen retomaría el “control total en las próximas horas”.
También reconoció que había “enfrentamientos” en Sorman y evocó la implicación de “cientos de voluntarios apoyados por muyaidines (combatientes)” para aplacar a la rebelión.
Sobre el sector en torno al enclave rebelde costero de Misrata (200 km al este de Trípoli), Ibrahim afirmó que las tropas del régimen habían “retomado el control de Tuarga” más al sur.
El sábado, los rebeldes indicaron haberse consolidado en la ciudad, que habían tomado la víspera.
Desde que se inició la revuelta el 15 de febrero, y que se convirtió en conflicto armado, los rebeldes se impusieron sobre la escena internacional pero no han logrado derrocar a Gadafi, pese a la ayuda de la Otan.
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