08 septiembre, 2011

Si un alcalde es malo, ¡que lo corran!, pide el Ejecutivo federal

El Presidente insistió ayer en que la reforma política premiaría o castigaría a los funcionarios, según su desempeño

Ivonne Melgar GUADALAJARA, 8 de septiembre.- Al insistir en la necesidad de una reforma política, el presidente Felipe Calderón afirmó que con ésta premiaría y castigaría a los alcaldes y “si es malo, ahí tiene que acabar su carrera política, punto.

¡Que lo corran!” Argumentó el mandatario federal que así ocurre en muchas democracias con los presidentes municipales y con los legisladores.

En la exposición del primer encuentro regional con motivo del 5º Informe de Gobierno, el Ejecutivo recordó haber presentado al Congreso una reforma política que busca, explicó, mayor representatividad a través de la elección consecutiva de alcaldes y diputados.

“¿Por qué razón? Porque si un alcalde o un diputado es bueno, tiene que seguir porque la gente lo reconoce como bueno, y tiene que seguir con el voto. Y si es malo, ahí tiene que acabar su carrera política, punto. Que lo corran. Así ocurre en varias democracias”, alegó.

La declaración del Presidente ocurrió al mediodía de ayer, en medio de la polémica en torno al presidente municipal de Monterrey, Fernando Larrazábal, a quien el PAN le pidió que dejara el cargo para investigar a fondo la situación de los casinos en esa ciudad y los presuntos nexos de sus allegados con los casos de corrupción en esos giros.

Cabe destacar que el viernes anterior, en su mensaje con motivo del Quinto Informe de Gobierno, Calderón dijo haber instruido a sus colaboradores a poner orden en esos establecimientos y fincar responsabilidades a los responsables de la tragedia del 25 de agosto, independientemente de su filiación partidista.

En el desmenuzamiento de su iniciativa, el Presidente habló sobre la necesidad de la evaluación electoral de los legisladores y contó lo que llamó “un chiste parlamentario” de sus tiempos de diputado.

Recordó Calderón las sesiones interminables para la aprobación del presupuesto en San Lázaro.

“Y un colega decía: Oye, ya estoy cansadísimo, ya no puedo más. Ahora sí termino este periodo y me voy de vacaciones a un lugar donde nadie me moleste, donde nadie me conozca, donde pueda descansar tranquilo”, narró.

“Y le contesta el compañero: Oye, vete a tu Distrito, que al cabo ahí nadie te conoce”, añadió Calderón.

En abono a la propuesta de la reelección, dijo que si ésta se aprueba, obligaría a los diputados a volver a sus distritos, toda vez que de sus ciudadanos dependen volver a conseguir el voto.

Manifestó su confianza en que las cosas cambiarían con la reforma: “Y se va a aparecer un día sí y otro también. O el alcalde, si quiere, verdaderamente, refrendar ahí, tiene que quedar bien con sus propios electores, es un poco la idea”.

Expuso que la iniciativa enviada al Congreso también propone las candidaturas independientes, porque los partidos políticos deben aprender a postular a los mejores cuadros.

“O ponemos a los mejores, o si no los ciudadanos que tengan una vía para poner a los mejores. Pero si no hay esa vía, no siempre ponemos a los mejores, y la regamos, y por eso vienen las decisiones ciudadanas”, justificó.

Calderón dijo que en México también se requiere fijar “un umbral para que los partidos puedan conservar registro”, con base en su representación y que sea ésta la que determine si se queda o se va.

En cuanto a la propuesta de establecer la segunda vuelta electoral, el Presidente sostuvo que ahora “somos tantos partidos que al final la gente debe quedar bien satisfecha con el resultado”.

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