Washington, 20 de octubre. El general retirado Barry McCaffrey, ex director de Oficina Nacional sobre Política de Drogas de la Casa Blanca, advirtió que si el próximo gobierno mexicano opta por negociar con los narcos los efectos serían desastrosos para el país.
“Si quien gane (las elecciones) viene y acomoda a estos criminales de las drogas diciendo que este es un problema de los gringos, eso sería un desastre para el estado de derecho y el futuro de México”, puntualizó.
Pero lamentó que en su país exista una negativa a aceptar el "peligro" que representan los cárteles de la droga mexicanos. "Hay una falta de voluntad para aceptar que el hecho de que esta amenaza no sólo es interna para México", dijo, el ex zar antidrogas estadunidense.
Estimó que “hay siete cárteles y 40 grupos subsidiarios que representan un peligro para Estados Unidos. Sí, estúpidos, son un peligro”, exclamó McCaffrey, quien discrepó sobre las afirmaciones de que la frontera del lado estadunidense es segura.
"Las ciudades son seguras, pero no donde termina el muro, estúpidos, donde hay gente cruzando la frontera, grupos de 20 o 30 personas con armas automáticas, cortando vallas, intimidando a los dueños de las fincas, secuestrando gente", insistió el general retirado. "Tenemos inadecuados recursos para controlar nuestra frontera", reconoció.
Al participar en un debate sobre drogas organizado por la Universidad George Washington, McCaffrey dijo que si tal escenario de la negociación se materializara, "entonces sería un enorme problema para nosotros (los estadunidenses). Lo que necesitamos es demostrar que estamos con estos valientes hombres y mujeres (que combaten en las fuerzas armadas y las policías), autoridades locales e incluiría también a los periodistas", dijo.
McCaffrey, quien fue el orador principal en el acto donde participaron otros ex funcionarios de gobierno, consideró que Estados Unidos debe ampliar el respaldo a México más allá del frente armado.
El ex director de la Oficina Nacional sobre Política de Drogas de la Casa Blanca dijo que la aprobación de una amplia reforma migratoria sería un elemento que tendría un positivo impacto en estos esfuerzos.
De igual forma apuntó la necesidad de que Estados Unidos haga un mejor trabajo en la frontera para atacar el tráfico de drogas hacia al norte y el trasiego ilegal de armas hacia el sur.
"No existe una estrategia unificada en la frontera", reconoció McCaffrey, quien apuntó que pese a la creación del Departamento de Seguridad Interna (DHS), existe descoordinación entre algunas agencias federales. Desestimó igualmente el riesgo de que México pueda caer en una situación de Estado fallido, pero reconoció que el reto que presenta el crimen organizado es significativo.
"No existe el riesgo de un Estado fallido. Nadie va a ser capaz de derrotar a los marinos o el Ejército en un enfrentamiento directo. Eso no va a pasar", enfatizó el ex zar antidrogas.
En ese mismo sentido, Anthony Placido, quien fuera hasta hace poco jefe de inteligencia de la Agencia Estadunidense contra las Drogas (DEA) desestimó la caracterización del narco como una insurgencia.
Placido reconoció que estos grupos podrían ser considerados como organizaciones terroristas a partir de algunas de las prácticas que han adoptado como parte de sus operaciones criminales.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario