La confianza del consumidor a nivel global se mantuvo débil en el tercer trimestre, y más del 60 por ciento de los consumidores afirma que no es buen momento para gastar mientras que uno de cada tres norteamericanos dice que no tiene efectivo sobrante, indicó el domingo un sondeo.
El panorama económico, seguido por la seguridad laboral, se convirtió en la mayor preocupación de los consumidores en el tercer trimestre, superando las preocupaciones sobre una creciente inflación, según el sondeo trimestral de la compañía de información y análisis globales Nielsen.
El Indice Global de Confianza del Consumidor de Nielsen cayó un punto en el tercer trimestre respecto al segundo trimestre, llegando a los 88 puntos, pero fue apuntalado por un aumento de confianza en las economías emergentes de Brasil y Arabia Saudí, que enmascararon la débil confianza en las grandes economías desarrolladas.
Una lectura por debajo de los 100 puntos indica que los consumidores se muestran pesimistas ante el panorama económico de los próximos meses.
La mayor confianza se registró en India por séptimo trimestre consecutivo, pero la lectura de ese país cayó en cinco puntos desde el segundo trimestre mientras que la de Arabia Saudí empezaba a crecer.
Sin confianza en la zona euro
La confianza del consumidor en la zona euro se mantuvo débil, especialmente en Francia, ante la profundización de la crisis de deuda de la región durante el pasado verano. La confianza en Grecia, en el centro de la crisis, subió fuertemente pero seguía siendo el cuarto mercado más débil del sondeo. La menor confianza se registró en Hungría.
Uno de cada cinco europeos dijo no tener excedentes para gastar, pese a que la cifra era mucho mejor que la de uno de cada tres en Norteamérica.
La confianza en la potencia europea, Alemania, era mucho mejor que en gran parte de Europa y Estados Unidos, pero al igual que Estados Unidos, su lectura cayó un punto respecto al trimestre anterior.
"El tercer trimestre fue volátil y desafiante para las economías globales y mercados financieros en medio del estancamiento de las cifras de desempleo en Estados Unidos y el empeoramiento de la crisis de deuda en la zona euro", indicó Venkatesh Bala, jefe del Cambridge Group, parte de Nielsen.
"Se está instalando una mentalidad recesionista entre los consumidores ya que más de la mitad dice estar actualmente en recesión, un alza de cuatro puntos porcentuales desde el último trimestre y de siete respecto a inicios de año. El resultado es una continua restricción del gasto a discreción, que se espera que continúe el próximo año", agregó.
El sondeo, tomado entre el 30 de agosto y el 16 de septiembre y que cubre a 28.000 consumidores de 56 países, arrojó que un 64 por ciento de los consumidores globales considera que no era un buen momento para gastar.
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