Según informes de Alfredo Castillo Cervantes, titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), los operativos implementados por autoridades estatales y federales en diferentes puntos de la entidad, durante los últimos meses, han ocasionado bajas considerables a esa organización.
Por ello, líderes de células delictivas de ese grupo criminal, explicó, se han estado dando a la tarea de intentar reconformar su estructura operativa de distribución de droga al menudeo y otro tipo de delitos que cometen en la zona sur y oriente del territorio estatal, principalmente.
Datos de la Agencia de Seguridad y Procuraduría estatal precisan que de mediados de 2010 a principios de octubre del presente año, se han detenido a 222 integrantes de La Familia Michoacana y desarticulado 34 células delictivas, de los cuales 85% tiene entre 17 y 35 años de edad.
Según testimonios de integrantes de La Familia Michoacana, detenidos y sujetos a proceso en penales estatales, de forma paralela a sus actividades ilícitas como son extorsión, narcomenudo y ejecución de personas, tienen la orden de reclutar a jóvenes para que se sumen a sus filas.
“Por unos amigos a los 16 años me integré a La Familia Michoacana; a veces fumo mariguana y en algún momento fui escolta de —Servando Gómez Martínez— La Tuta”, dijo Eliborio Tafoya Díaz, de 21 años de edad y oriundo de Michoacán, presentado por las autoridades estatales el pasado 5 de octubre como presunto autor de por lo menos una docena de ejecuciones en el Estado de México y en Michoacán.
Con datos de las mismas autoridades de seguridad en la entidad, se establece que el perfil de los jóvenes y adolescentes que han reclutado los mandos medios de las células delictivas de La Familia, son jóvenes de entre 16 y 25 años de edad, con nivel de estudios de primaria y secundaria y vecinos de zonas marginadas del Estado de México, aunque en algunos casos, llegaron a radicar a dicha entidad en los últimos dos años.
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