08 octubre, 2011

Rajoy cierra la convención sin propuestas y promete gobernar desde la concordia

Vídeo: Efe

  • 'Quiero entenderme con los que compartan el objetivo de salir de la crisis'
  • Recuerda la gestión de Aznar y Suárez: 'Esta vez, podemos volver a hacerlo'
  • Advierte de que 'no será fácil', pero promete gobernar 'desde el diálogo'
  • El público le ha interrumpido al grito de: '¡Oa, oa, oa, Rajoy a La Moncloa!'

Luis Ángel Sanz | Carmen Remírez de Ganuza | Málaga

El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha cerrado la Convención Nacional que el PP ha celebrado en Málaga con una promesa: gobernar "buscando la concordia" y "desde el diálogo" para "sacar a España de la crisis".

"Quiero entenderme con todos los que compartan el objetivo nacional de sacar a España de la crisis, crear empleo y generar bienestar", ha resumido.

El candidato ha invocado la gestión que tuvieron que llevar a cabo los ex presidentes Adolfo Suárez y José María Aznar (este último presente en el auditorio) para salir de una crisis política y económica y animó a los suyos con la idea de que "esta vez, podemos volver a hacerlo".

"Ésa es nuestra historia; una historia de éxitos, y esta vez, podemos volver a hacerlo", ha asegurado ante un público entregado. "No será fácil", ha añadido, pero tampoco lo fue para Aznar en 1996 o para Suárez en los años 70 y "lo lograron".

'¡Oa, oa, oa, Rajoy a La Moncloa!'

Rajoy ha hecho un discurso muy político y se ha dirigido al auditorio en todo momento como si ya hubiera ganado las elecciones. A pesar de estar en la tribuna del Palacio de Ferias y Congresos de Málaga, el presidente 'popular' parecía estar pronunciando su discurso del balcón de la sede nacional del PP al proclamar que quiere ser "el presidente de todos los españoles", no "el presidente de los militantes y votantes del PP".

Y como si estuvieran en la calle Génova de Madrid, el público le ha interrumpido varias veces con gritos de "¡Oa, oa, oa, Rajoy a La Moncloa!" y "¡A por ellos, oé!".

La peor herencia posible

En su discurso, Rajoy ha insistido, como hizo Aznar el jueves, en que su Gobierno "recibirá la peor herencia que ningún gobierno ha legado jamás al siguiente". "Desde luego que tienen motivo para ocultar su legado y para avergonzarse", ha dicho en referencia directa al PSOE, "pero lo que no van a conseguir es que lo olviden los españoles, por mucho que ahora se empeñen en negarse a sí mismos".

El líder de la oposición ha querido insistir en sus prioridades -el empleo y la economía- y en el que será un "nuevo estilo de gobierno". Pero no ha necesitado hacer ni una sola promesa electoral. Tenía el auditorio en el bolsillo. Y también habló como si también tuviera ya la mayoría absoluta en el mismo bolsillo.

Decir la verdad, aunque incomode

"El nuevo estilo" que acuñó ayer Rajoy estará lejos del talante que hizo famoso Zapatero. Rajoy apostará por "decir la verdad, aunque sea incómoda" y "no negar la realidad, ni ocultar los problemas". Además, se ha comprometido a "gobernar con valentía", aunque no ha avanzado ninguna de las medidas 'valientes' que podría tomar, y "desde el diálogo", además de buscar siempre "la concordia entre españoles", en una referencia velada a la Transición, reforzada con su alusión anterior a Suárez.

Por ello, ha hecho un llamamiento a que todos participen en "un gran proyecto de recuperación" en el que "no sobrará ningún español".

No a las trincheras del PSOE

El presidente 'popular' pretende contrastar este estilo con el de los gobiernos de Zapater, que "han pretendido forzar a los españoles a elegir entre bandos y trincheras; yo no pienso hacer tal cosa".

El Palacio de Ferias y Congresos de Málaga estaba a rebosar para aclamar a Mariano Rajoy y al presidente del PP andaluz, Javier Arenas. Los más aplaudidos, junto a Rajoy, fueron el presidente de honor del PP, José María Aznar, y el ex presidente y ahora máximo responsable de Bankia, Rodrigo Rato.

El PP ha cerrado con este acto la Convención Nacional del PP en la que en principio se iba a aprobar el programa. Finalmente, ni siquiera se han esbozado sus líneas generales.

No hay comentarios.: