Este domingo en Michoacán se elige a un nuevo gobernador, alcaldes y diputados. Pero además de los candidatos y votantes, hay otros actores que participan en el proceso: los carteles del narcotráfico.
Hace cinco años en este estado al oeste de México inició la actual guerra contra el narcotráfico, que ha causado la muerte a unas 40.000 personas.Michoacán es cuna de uno de los carteles más peligrosos del país, La Familia Michoacana, que tras una fractura interna dio origen a otro grupo, Los Caballeros Templarios.
Es además la tierra natal del presidente Felipe Calderón y de su hermana Luisa María, conocida como Cocoa, quien según varias encuestas es la candidata a la gobernación con más posibilidades de ganar los comicios.
La campaña se ha desarrollado en un clima de violencia. Hace unas semanas Ricardo Guzmán Romero, alcalde de La Piedad, la segunda ciudad más grande del estado, fue asesinado mientras repartía propaganda electoral.
Líderes de los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) –que gobierna en el estado- reconocieron que decenas de candidatos renunciaron por amenazas de la delincuencia organizada.
Quienes aspiran a la gobernación tienen vigilancia especial. Luisa María cuenta además con el resguardo de policías federales de élite.
El gobierno local y las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y de Seguridad Pública desplegaron a más de 2.000 efectivos para cuidar las votaciones.
Lazos de familia
"Las elecciones se van a desarrollar en un clima complejo, difícil y puede impactar en el número de abstencionistas que esta situación puede provocar"
Jesús Ortega, ex presidente del PRD
Pero a partir de 2006 la actividad de estos grupos adquirió otro cariz, cuando la batalla entre La Familia y el cartel de Los Zetas aumentó la violencia a niveles que no se conocían en el país.
Fue en un salón de baile al sur del estado donde aparecieron seis personas decapitadas, algo no visto hasta ese entonces en México, y luego el grupo impuso a varios alcaldes el nombramiento de jefes de policía afines a ellos.
La Familia estableció una especie de cogobierno en decenas de municipios al sur del estado, e incluso un diputado federal, Julio César Godoy, fue acusado de formar parte del grupo.
El legislador es familiar del gobernador, Leonel Godoy, y actualmente es buscado por la Procuraduría (fiscalía) General de la República (PGR).
"Circunstancias complejas"
"Las elecciones se van a desarrollar en un clima complejo, difícil y puede impactar en el número de abstencionistas que esta situación puede provocar", le dice a BBC Mundo" Jesús Ortega, ex presidente del PRD.
"Se da una competencia en circunstancias muy complejas por la presencia de algunos grupos delincuenciales que ubicaron a Michoacán como una zona geográfica estratégica", añade.
¿Cuánto puede afectar a las votaciones la violencia por el narcotráfico?
El gobierno local identificó 18 sitios donde los comicios están en riesgo. La mayoría están en regiones donde operan carteles de las drogas.
En esa región, al sureste del estado, fueron secuestrados empleados de las empresas encuestadoras Parametría y Mitofsky, que realizaban sondeos electorales.
A pesar de las evidencias, el Instituto Electoral de Michoacán (IEM), que regula los comicios, confía en que no habrá problemas.
"Tenemos vigilancia en todas las secciones electorales", le dice a BBC Mundo Rodolfo Farías, consejero del IEM.
Y la consejera Lourdes Becerra completa: hasta ahora no hay indicios que la votación sea menor a los niveles históricos, es decir, 48% de la lista completa de electores.
En todo caso, reconoce Jesús Ortega, la violencia por el narcotráfico es un elemento que influye en los electores. Cuántos votos menos, es algo que se conocerá este domingo.
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