Justo cuando estaba segura que al Estado Mexicano no podría salírsele más de las manos el país, llega Julián 'El Terrible' a darle con el mazo a una manifestación pacífica en Juárez.
El martes 1 de Noviembre, en respuesta a una convocatoria del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, el Frente Plural Ciudadano se dio a la tarea de ejercer su derecho constitucional a la libre manifestación pública y recordar a los muertos de este trágico genocidio disfrazado de guerra contra el Narco y adornado con el libelo de lucha contra la delincuencia.
Los manifestantes se encontraban realizando pintas y colocando cruces en la intersección de las Avenidas Triunfo de la República y López Mateos, cuando fueron agredidos a macanazos y puntapiés por Policías Municipales y de Vialidad de Juárez; después detuvieron a varios de los manifestantes. He aquí uno de los videos que captó imágenes de lo ocurrido:
Para quienes tenemos edad y memoria, es inevitable establecer la odiosa comparación entre el Estado Policial que se vive en algunas ciudades de México –cómo Juárez– y aquellos tiempos infames de la Operación Cóndor en Sudamérica: la apatía, la nula solidaridad de las policías y el ejército con el pueblo; la información filtrada en los medios dónde el discurso triunfalista prevalece aún en las peores circunstancias y los problemas sociales se trivializan con Teletones y redondeos de cuentas en supermercados.
Pero en Juárez esta estrategia de mano dura de la policía local contra las manifestaciones pacíficas resulta especialmente alarmante, ya que quien tiene el valor de salir a la calle a manifestarse, en el contexto juarense, realiza un acto kamikazee, porque la Constitución no protege, se ignora, se pisotea, se le reduce a un diccionario de conceptos inaplicables.
Porque en Juárez, quien reniega del crimen organizado, los secuestros, las desapariciones forzadas y las muertas de Juárez, muere a balazos. Porque quien opina que esta guerra es un fracaso y que los muertos deben recordarse con nombre propio, es esposado y encerrado en una prisión.
El secretario de seguridad pública de Juárez dejó un legado de abusos de derechos humanos en Tijuana. Julián "El Terrible" Leyzaola, aplaudido por autoridades de ambos lados de la frontera, a quien se le acredita la paz imaginaria que se vive actualmente en Tijuana, tiene cuentas pendientes, denuncias y hasta recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y el 1ro de Noviembre en Juárez, dejó su huella autoritaria en las calles de Juárez aplastando los derechos de los ciudadanos, cuyo único delito fue tener el valor de manifestarse contra una estrategia oprobiosa, recordando a sus muertos.
Son 32 los detenidos tras el zafarrancho del 1ro de Noviembre, entre los que se encuentran varios luchadores sociales y 15 estudiantes, 3 menores de edad, 2 ingenieros agrónomos, 3 maestros, 2 médicos, 1 epidemiólogo, 1 electricista y 1 jardinero. Seguramente un gran golpe al narcotráfico, poner tras las rejas a personas que tienen un quehacer legítimo en nuestra sociedad.
El miércoles, estos 32 detenidos fueron consignados al Ministerio Público por Lesiones, Daños y Delitos contra la Salud––casualmente a uno de los manifestantes se le encontró un cigarro de mariguana.
No es la primer vez que una manifestación pacífica es aplastada con todo el peso de la ley. El 29 de Octubre del 2010, la Policía Federal agredió a los estudiantes de la Universidad Autónoma de Juárez, durante una caminata pacífica. Un estudiante de sociología, José Darío Alvarez Orrante, recibió no la protección prometida por Felipe Calderón, sino un tiro por la espalda por parte de sus policías encapuchados.
El Frente Plural Ciudadano, emitió un comunicado donde afirma que "Por desgracia este no es un hecho aislado: en las últimas semanas varios jóvenes de diversas organizaciones sociales han sido detenidos por elementos de la policía municipal de manera arbitraria. Por el sólo hecho de ser jóvenes se les da el trato de "sospechosos", se les exige se identifiquen con la credencial de elector, así no tengan aun 18 años y se les encarcela sin justificación alguna. El colmo es que, incluso a quienes realizan trabajos de servicio social en esta muy vulnerada comunidad se les agrede. Así sucedió con un grupo de jóvenes de la Red de la Infancia que realizan jornadas educativo-culturales con niños y padres de familia de las colonias populares. A ellos se les detuvo y el camión que utilizan para apoyar estas jornadas, permanece ilegalmente incautado por la policía juarense".
Cuando Julián El Terrible fue Secretario de Seguridad Pública en Tijuana, se escucharon las mismas quejas por parte de jóvenes que eran acosados por la fuerza pública, y consignados por el delito de vagancia por transitar en las calles de SU ciudad, sin identificación oficial.
Los hechos del 1ro de Noviembre en Juárez, han despertado un movimiento dentro y fuera de las redes sociales que buscan la destitución de Leyzaola como secretario de seguridad pública de Juárez y exigen que se le finquen responsabilidades por los abusos cometidos y por manejarse fuera de toda ley.
No sé si a Leyzaola como en Tijuana, estas demandas ciudadanas le harán lo que el viento a Juárez, lo que si es un hecho es que no puede ser que se mantenga a toda una población presa entre la violencia, la ignonimia y el cinismo de una raza de perros descerebrados que se llaman asimismo gobierno.
El gobierno federal hizo una promesa de no dejar solo a Juárez, sin embargo, hoy más que nunca en esta ciudad se sigue sintiendo la profunda y lacerante soledad de una población huérfana de justicia.
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