Alerta contra la intervención palmaria de la delincuencia en elecciones; destaca apoyo a ancianos y estudiantes; dice que jueces están en riesgo de ser corrompidos por delincuencia; abre etapa anticrimen con énfasis en prevención
Leticia Robles de la Rosa“Sería irresponsable dejar estancado a México y a la zaga del crecimiento que necesitamos, al que tenemos derecho.
Sería irresponsable marginarle esa oportunidad, porque existan intereses, intereses particulares muy específicos que frenan estas decisiones estratégicas”, dijo durante su mensaje con motivo de su quinto año de gobierno.
Durante el acto celebrado en el Campo Marte, el presidente Calderón hizo un recuento de los logros de su gobierno, entre los que destacó la cobertura universal de los servicios de salud, el apoyo a personas de la tercera edad por medio del Programa 70 y más, así como la entrega de media beca a un millón más de estudiantes de educación media superior.
Buena parte del mensaje del Ejecutivo estuvo dedicado al tema de la seguridad. En ese contexto llamó a todas las fuerzas políticas del país a definir con claridad su repudio contra el crimen y la violencia generada por los delincuentes.
Advirtió que no es tiempo de mezquindades y cálculos políticos ante la amenaza de los criminales, que ya ponen en riesgo la democracia del país y ningún partido puede permanecer silente u omiso.
En ese contexto anunció una nueva etapa en su lucha contra el crimen, centrada en la prevención del delito y las adicciones.
“La intervención palmaria y evidente de los delincuentes en procesos electorales es un dato nuevo y es un dato preocupante; un dato al que ningún partido político puede permanecer silente u omiso, es una amenaza para todos y a la que juntos, sin titubeos, debemos cerrarle el paso”, aseveró.
Calderón exige no caer en mezquindades
El presidente Felipe Calderón llamó a todas las fuerzas políticas del país a definir con claridad su repudio contra el crimen y la violencia generada por los delincuentes, pues no es tiempo de mezquindades y cálculos políticos ante la amenaza de los criminales, que ya ponen en riesgo la democracia del país y ningún partido puede permanecer silente u omiso.
Durante el mensaje por los cinco años de su gobierno, el Presidente de la República anunció una nueva etapa en su lucha contra el crimen, centrada en la prevención del delito y las adicciones, e insistió en que los jueces están en la mira corruptora de los delincuentes.
"Es indispensable que el Poder Judicial revise sus estructuras y sus integrantes. Sé que la mayoría de los jueces y magistrados son personas intachables, pero debemos ser conscientes de que el poder corruptor e intimidador de los criminales puede poner a jueces y magistrados en la mira y debemos estar preparados para ello, porque nadie está exento de ese mal".
Felipe Calderón insistió en que "ésta no es una lucha de un Presidente, de un gobierno o de un partido: es una lucha de todos los mexicanos y que a todas las autoridades y a todos los Poderes nos corresponde librar. Para ganarla, amigos, es necesario que todas las fuerzas políticas expresen con claridad, sin dobles discursos, sin regateos, su repudio unánime al crimen organizado y a la violencia que genera. Aquí no hay espacio ni para mezquindades ni para cálculos políticos, porque hablamos de un mal que representa una amenaza a la viabilidad del Estado mexicano y una amenaza clara cada vez más obvia a la democracia nacional".
RespuestaTambién advirtió que entre más violencia generen los integrantes del crimen organizado más contundente será la respuesta del gobierno federal.
El mandatario federal ratificó lo que dijo el pasado 20 de noviembre, sobre la intromisión del crimen organizado en los procesos electorales.
"La intervención palmaria y evidente de los delincuentes en procesos electorales es un dato nuevo y es un dato preocupante; un dato al que ningún partido político puede permanecer silente u omiso, es una amenaza para todos, y a la que juntos, sin titubeos, debemos cerrarle el paso", dijo.
El Presidente hizo un reconocimiento al trabajo de soldados y marinos, que arriesgan la vida por cuidar a todos los mexicanos.
También hizo un reconocimiento público a los policías federales y a los integrantes del Estado Mayor Presidencial, porque "han cumplido su misión de tenerme aquí frente a ustedes, en las circunstancias más demandantes que quizás les haya tocado enfrentar en muchísimo tiempo".
Y reconoció a "miles y miles de policías municipales, estatales, federales que, a pesar de la enorme presión a la que están sometidos por la delincuencia, siguen sirviendo a la ciudadanía con honestidad".
El Presidente evoca a Mouriño y Blake
Hizo una pausa en su discurso que ya registraba una hora. El presidente Felipe Calderón tomó un poco de agua y recordó a sus amigos Juan Camilo Mouriño y Francisco Blake.
“También les agradezco y los recuerdo con el alma a los compañeros y amigos que en el cumplimiento del deber se nos han adelantado, Juan Camilo y Francisco Blake se nos adelantaron. Sé que gracias a ellos avanzamos y por ellos seguiremos con determinación con México hacia adelante”, dijo el Presidente.
Como impulsados por un resorte, los miles de trabajadores del gobierno federal que lo acompañaron en su mensaje por el quinto año de gobierno, se pusieron de pie para aplaudir la evocación de estos dos secretarios de Gobernación que murieron en sendos accidentes aéreos.
Quizás porque fue en el mismo Campo Marte donde ambos funcionarios y amigos del Presidente fueron homenajeados, pero la emoción de los presentes era evidente, sobre todo cuando Felipe Calderón le agradeció a Gloria, viuda de Francisco Blake, que fuera uno de los invitados a este último corte de caja de su gobierno, a un año de concluirlo.
Fue el momento más emotivo. Ernesto Cordero, aspirante presidencial y también muy amigo de Mouriño, asentía una y otra vez, mientras aplaudía con fuerza la memoria de su también amigo Francisco Blake. Josefina Vázquez Mota y Santiago Creel, igualmente aspirantes presidenciales, también se veían emocionados.
Agustín Carstens, gobernador del Banco de México; Eduardo Sojo, titular del INEGI y Raúl Plascencia, de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, fueron los únicos representantes de instituciones autónomas que llegaron a la cita.
También estaba José González Morfín, presidente del Senado, y decenas de presidentes municipales, senadores y diputados federales que se dieron cita para festejar un lustro de trabajo.
Asimismo, estaban representantes del sector empresarial y varios líderes sociales sin filiación partidista.
La familia panista arropó en todo momento a su líder moral, Felipe Calderón, desde el momento mismo en que apareció en el templete acompañado por su esposa Margarita Zavala y sus hijos María, Luis Felipe y Juan Pablo, a quienes agradeció su apoyo, paciencia y momentos felices que le proporcionan.
También estuvo el recuerdo de don Luis Calderón, su padre, quien le dijo que servir a México es un honor y “hoy lo ratifico; servir a México es un honor y servirlo en momentos tan críticos, es un doble honor”, aseguró.
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