10 de diciembre de 2011 — Después de las pláticas que duraron toda la noche del jueves 8 hasta casi las 5 de la mañana del viernes 9, que se reanudaron después a media mañana del mismo viernes, la cumbre del Consejo de la Unión Europea (UE) en Bruselas, fue un rotundo fracaso. Se planteó que un "cambio en el tratado" de la UE, que impusiera mayor rigor presupuestal y una austeridad más draconiana, era la "última oportunidad" para que el euro recobrara su credibilidad, pero después de 10 horas de confrontaciones quedó claro que no habrá un cambio en el tratado en absoluto, por falta de unanimidad entre los estados miembros de la UE. Esto significa, en esencia y espíritu (aunque no todavía en la letra) la ruptura de la actual UE.
No Gran Bretaña ni Hungría quisieron firmar nada, y Suiza y la República Checa, otros dos Estados que no son miembro de la zona del euro, quieren consultarlo primero con sus parlamentos o con sus socios en la coalición de gobierno. Y es que firmar los cambios en el tratado significa inmediatamente la adopción del euro. Como una alternativa miserable, en las próximas semanas solo se elaborarán acuerdos binacionales, acuerdos a los que se podrán unir voluntariamente otros estados miembros de la UE.
En la práctica, el primer ministro David Cameron y los británicos, por sus propios motivos, vetaron los cambios en el tratado. Para aceptar cambios en el tratado, Cameron exigió a nombre de los "intereses vitales de Gran Bretaña", que la City de Londres no quedase bajo los organismos de supervisión financiera de la UE. El presidente francés Nicholas Sarkozy rechazó esto.
Después de emitir su veto, Cameron dijo que le deseaba "todo lo mejor" a la nueva unión fiscal de los países miembros que sean. Agregó que "estaba muy feliz de no pertenecer al euro y no pertenecer al Tratado de Schengen que elimina los controles fronterizos". En entrevista con la BBC en Bruselas, el Secretario de Relaciones Exteriores británico William Hague dijo: "Esta [decisión] no nos excluye del club". En asuntos como política exterior, como es la posición en torno a Siria y en cuestiones económicas, Gran Bretaña continua estando en una posición de liderato, agregó.
En realidad, tampoco tienen el dinero para hacer nada. A pesar de que el presidente del Banco Central Europeo (BCE) Mario Draghi llegó hasta decir que dicho esquema no era muy creíble, por la mañana Sarkozy declaró que los Estados miembros de la UE en lo individual "van a estudiar la oportunidad" de prestarle 200 millones de euros al Fondo Monetario Internacional (FMI) para que a su vez les preste ese dinero a los Estados miembros de la UE que están en problemas (Italia y España).
No se aumentó la capacidad de respuesta del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera v (FEEF) y continua en los hipotéticos 500 mil millones de euros, una bicoca si se compara con las necesidades de las naciones al borde del abismo.
Entre las decisiones tomadas se incluye:
* Sanciones automáticas si se violan los estrictos reglamentos de austeridad (límites de endeudamiento etc.)
* Ya no se le va a pedir a los bancos que acepten mas "rebajas" en sus cobros; Grecia sigue siendo la excepción dado que los pobres "mercados" se vieron muy sacudidos por esto.
Se aumentará el apalancamiento del FEEF a 750 mil millones de euros. El Mecanismo de Estabilidad Europeo (MEE) empezará a funcionar antes de lo planeado, es decir para el 2012; no tendrá licencia para funcionar como banca.
El FMI recibirá 200 mil millones de euros de los bancos centrales nacionales y del Banco Central Europeo (BCE) para "ayudar a los países en crisis".
Sin embargo, hay que tener en mente el hecho de que el BCE dejó en claro ayer que le ha estado dando dinero a los bancos durante tres años, básicamente gratis y casi sin ninguna garantía prendaria. La hiperinflación sigue a todo vapor, a pesar de lo que estos tipos decidan en Bruselas.
Sobre cómo va a conseguir el dinero el FMI, Sarkozy dijo hoy en la mañana en una conferencia de prensa a las 5 am que en los próximos diez días, van a decidir cómo lograr esto.
También, en la prensa francesa hay comentarios sobre un papel "gerencial" del BCE y del FEEF y el MEE. Ya veremos lo que implica esto más adelante.
Esta mañana Moody's le bajó la calificación a los siguientes bancos franceses: BNP Paribas, Société Générale y Crédit Agricole. Ayer S&P amenazó con degradar a 12 bancos españoles y 2 irlandeses. Ya están considerando cambiar las calificaciones del país. Los bancos afectados podrían ser el Banco Santander y Caixa Bank. En Irlanda serían en Bank of Ireland y el Irish Life & Permanent.
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