Matar a civiles inocentes en el marco de operaciones encubiertas estadounidenses en Siria

Matar a civiles inocentes en el marco de operaciones encubiertas estadounidenses en Siria

Movilizar el apoyo público para declarar la guerra a Siria aduciendo la iniciativa de protección de Naciones Unidas

by Michel Chossudovsky

La doctrina militar estadounidense atribuye un papel fundamental a los «sucesos que producen muertes masivas» en los que son asesinados civiles inocentes.

Los asesinatos se llevan a cabo de forma deliberada en el marco de una operación encubierta. Y se culpa al enemigo de las atrocidades resultantes.

El objetivo es justificar un programa militar aduciendo fundamentos humanitarios. La doctrina se remonta a 1962: la Operación Northwoods.

 Siguiendo un plan secreto del Pentágono de 1962 que fue bautizado con el nombre de Operación Northwoods se iba a matar a civiles de la comunidad cubana de Miami en el marco de una operación encubierta. El objetivo era desencadenar una «valiosa oleada de indignación en la prensa estadounidense». De los asesinatos y los «actos de terrorismo» se culparía a continuación al gobierno cubano de Fidel Castro.

El objetivo de este siniestro plan -que los entonces Secretario de Defensa, Robert McNamara y el Presidente J. F. Kennedy se negaron a llevar a cabo- era recabar el apoyo de la opinión pública para declarar la guerra a Cuba.

A principios de la década de 1960, los dirigentes del ejército estadounidense redactaron planes para matar a población inocente y cometer actos de terrorismo en ciudades estadounidenses con la intención de obtener el apoyo de la opinión pública para declarar la guerra a Cuba.

Ese plan, cuya denominación en clave era Operación Northwoods, incluía el posible asesinato de emigrados cubanos, el hundimiento en alta mar barcazas de refugiados cubanos, el secuestro de aviones, la explosión de un buque estadounidense e, incluso, la orquestación de una serie de acciones terroristas en ciudades estadounidenses.

Los planes se concibieron para engañar a la opinión pública estadounidense y a la comunidad internacional con el fin de que apoyara una guerra con la que derrocar al entonces nuevo dirigente de Cuba, el comunista Fidel Castro.

Los máximos mandatarios del ejército estadounidense contemplaban incluso la posibilidad de causar bajas militares estadounidenses y llegaron a escribir cosas como «podríamos hundir un buque estadounidense en la Bahía de Guantánamo y culpar a Cuba» y «la aparición de la lista de bajas en la prensa estadounidense originaría una valiosa oleada de indignación nacional».

... Los documentos muestran que «el Estado Militar Conjunto redactó y aprobó planes para lo que podría haber sido el proyecto más corrupto jamás concebido por el gobierno estadounidense», escribe Bamford. (Se buscan soldados estadounidenses para provocar la guerra contra Cuba - ABC News; la negrita es mía. Este documento secreto del Pentágono fue desclasificado y se puede consultar fácilmente (Véase Operación Northwoods; véanse también documentos del National Security Archive del 30 de abril de 2001).

El documento de la Operación Northwoods de 1962 llevaba por título «Justificación de la intervención militar estadounidense en Cuba». «El memorándum altamente secreto expone los planes de Estados Unidos para pergeñar de manera encubierta diversos pretextos que justificaran una invasión estadounidense de Cuba. Estas propuestas -parte de un programa anticastrista secreto denominado “Operación Mongoose”- incluía fingir el asesinato de cubanos que vivieran en Estados Unidos para desarrollar una “campaña terrorista cubana comunista en la zona de Miami, en otras ciudades de Florida e, incluso, en Washington”, e incluía “el hundimiento de un barco de refugiados cubanos (reales o ficticios)”, la simulación de un ataque aéreo cubano contra un avión comercial y la construcción de un suceso del estilo de “Recordemos al Maine” hundiendo un buque estadounidense en aguas cubanas y, a continuación, culpando del incidente al sabotaje cubano»