Alfredo Pérez Rubalcaba toma un café con
la vicesecretaria general del partido, Elena Valenciano; el lehendakari,
Patxi López, y el líder del PSdeG, Pachi Vázquez. / PSOE
Una gran reforma fiscal y una “ley de sostenibilidad social” son las dos propuestas que ha lanzado al comité federal del PSOE
su secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, que durante todo el día
ha permitido que calara la idea de que el partido endurecerá la
estrategia de oposición; y después, en la rueda de prensa posterior a la
reunión se ha mostrado más ambiguo, dejando un resquicio a un posible
entendimiento.
“La fase de buscar nosotros el acuerdo se ha acabado, porque nos han dicho muchas veces que no. Vamos a construir una alternativa. Hasta aquí hemos llegado. El Gobierno nos ha traído hasta aquí”, había asegurado la vicesecretaria general del partido, Elena Valenciano, en una comparecencia a primera hora de la tarde, en la misma línea que otros dirigentes socialistas.
Rubalcaba ha sido muy duro con el Gobierno. Le ha pedido que evite el rescate que solo traerá "más sufrimiento". Como alternativa, ha planteado un “cambio a fondo” en el sistema fiscal que incluiría un impuesto a grandes fortunas, más impuestos a las Sicav (instrumentos utilizados por las grandes fortunas para gestionar su patrimonio) y a las sociedades patrimoniales, así como límites a las deducciones del IRPF y un cambio en el impuesto de sociedades.
La reforma del sistema impositivo que el líder de los socialistas ha puesto sobre la mesa afectaría "a los que más tienen, los que más ganan y los que más heredan", según ha explicado el líder de los socialistas. Con lo recaudado, el PSOE se propondría revisar la subida del IVA en aspectos especialmente "dañinos" y la recuperación del gasto en sanidad y en educación.
Por su parte, la propuesta de una ley de “sostenibilidad social” iría encaminada a proteger de los recortes un “catálogo mínimo de prestaciones públicas”, igual para toda España, aprovechando que el capítulo 135 de la Constitución –el que modificaron PSOE y PP con la reforma constitucional sorpresa de agosto de 2011, imponiendo el corsé al gasto público- establece la “sostenibilidad social” como un elemento a preservar por encima del control del déficit.
Durante su discurso, a puerta cerrada, Rubalcaba ha afirmado que
estos nueve meses de Gobierno han confirmado “el carácter antisocial del
PP” y ha augurado que el más que probable rescate será “el certificado
de incompetencia de Rajoy”, según han contado fuentes del órgano de
dirección. Frente a ese rescate, que el PSOE va a rechazar
“rotundamente” porque supondrá más recortes (así figura en la resolución política
que se votará esta tarde), el secretario general de los socialistas
propondrá rediseñar el sistema de impuestos para generar más ingresos.
Los 258 miembros del máximo órgano de dirección entre congresos han discutido desde poco antes del mediodía de este domingo la nueva estrategia de oposición trazada por su líder, después de que este expusiera sus ideas en un discurso de algo más de una hora en el que algunos han visto una apuesta por una actitud claramente más dura ante el Gobierno. Treinta y un dirigentes han pedido la palabra.
“Ha sido un discurso profundo, que marca un punto de inflexión para pasar ya a ser la alternativa en este país”, ha dicho el gallego Pachi Vázquez en un receso del debate. El vasco Patxi López ha añadido que Rubalcaba “ha marcado el rumbo”, y lo ha explicado así: “Nos vamos a oponer claramente y contundentemente a los recortes del Gobierno. Vamos a ser todo lo contundentes que haga falta. Sabemos también que este país necesita acuerdos, pero son acuerdos que el PP ha impedido”.
Vázquez y López han comparecido ante los medios tras ser ratificados por aclamación como candidatos a las elecciones gallegas y vascas del 21 de octubre. Toda la reunión es a puerta cerrada. Incluido el discurso de Rubalcaba por primera vez en 12 años, para “fomentar el debate interno”, según su equipo de dirección.
Los dos candidatos han rechazado con delicadeza la propuesta que traía al comité federal el madrileño Tomás Gómez, y en la que ha insistido esta mañana ante las cámaras: exigir al Gobierno un referéndum sobre el rescate, si finalmente lo hay. Gómez lo ha comparado con el referéndum sobre la entrada en la OTAN que convocó Felipe González en 1986. “La política tiene sus tiempos. En este momento el Gobierno tiene que pasar por el Parlamento para tomar esas decisiones”, se ha desmarcado Patxi López. Vázquez ha coincidido: “En este momento hay que apostar por la vía de los Parlamentos, los representantes legales de los ciudadanos”.
El propio Rubalcaba se mostró en contra de la propuesta del referéndum hace dos días; tampoco la va a apoyar Andalucía, la principal federación del PSOE, según ha confirmado a este periódico su número dos, Mario Jiménez; ni la federación valenciana, según ha adelantado su secretario general, Ximo Puig.
El secretario general de los socialistas extremeños, Guillermo Fernández Vara, ha sido más ambiguo: ha dicho que ahora mismo la vía debe ser la parlamentaria, pero ha añadido: "Si se produce una política de hechos consumados y no se debate en España, hay que pedir moción de confianza al señor Rajoy; y, solo en caso de que no quisiera, sería planteable otra cosa".
"El PNV está volviendo a poner encima de la mesa su viejo raca-raca soberanista, un Plan Ibarretxe con otro nombre, que es un plan independentista a plazos que lo que hace es dividir y clasificar a los vascos", ha dicho, informa Europa Press.
Según ha puesto de relieve, durante estos tres años y medio en el poder, su Ejecutivo ha conseguido principalmente que ésta haya sido "la legislatura de la paz y la libertad". "Hemos conseguido, por fin, acabar con el ciclo de la violencia terrorista de ETA y conquistar ese sueño colectivo negado durante 40 años", ha subrayado.
“La fase de buscar nosotros el acuerdo se ha acabado, porque nos han dicho muchas veces que no. Vamos a construir una alternativa. Hasta aquí hemos llegado. El Gobierno nos ha traído hasta aquí”, había asegurado la vicesecretaria general del partido, Elena Valenciano, en una comparecencia a primera hora de la tarde, en la misma línea que otros dirigentes socialistas.
Rubalcaba ha sido muy duro con el Gobierno. Le ha pedido que evite el rescate que solo traerá "más sufrimiento". Como alternativa, ha planteado un “cambio a fondo” en el sistema fiscal que incluiría un impuesto a grandes fortunas, más impuestos a las Sicav (instrumentos utilizados por las grandes fortunas para gestionar su patrimonio) y a las sociedades patrimoniales, así como límites a las deducciones del IRPF y un cambio en el impuesto de sociedades.
La reforma del sistema impositivo que el líder de los socialistas ha puesto sobre la mesa afectaría "a los que más tienen, los que más ganan y los que más heredan", según ha explicado el líder de los socialistas. Con lo recaudado, el PSOE se propondría revisar la subida del IVA en aspectos especialmente "dañinos" y la recuperación del gasto en sanidad y en educación.
Por su parte, la propuesta de una ley de “sostenibilidad social” iría encaminada a proteger de los recortes un “catálogo mínimo de prestaciones públicas”, igual para toda España, aprovechando que el capítulo 135 de la Constitución –el que modificaron PSOE y PP con la reforma constitucional sorpresa de agosto de 2011, imponiendo el corsé al gasto público- establece la “sostenibilidad social” como un elemento a preservar por encima del control del déficit.
La fase de buscar nosotros el acuerdo se ha acabado. Hasta aquí hemos llegadoElena Valenciano ante la prensa
Los 258 miembros del máximo órgano de dirección entre congresos han discutido desde poco antes del mediodía de este domingo la nueva estrategia de oposición trazada por su líder, después de que este expusiera sus ideas en un discurso de algo más de una hora en el que algunos han visto una apuesta por una actitud claramente más dura ante el Gobierno. Treinta y un dirigentes han pedido la palabra.
“Ha sido un discurso profundo, que marca un punto de inflexión para pasar ya a ser la alternativa en este país”, ha dicho el gallego Pachi Vázquez en un receso del debate. El vasco Patxi López ha añadido que Rubalcaba “ha marcado el rumbo”, y lo ha explicado así: “Nos vamos a oponer claramente y contundentemente a los recortes del Gobierno. Vamos a ser todo lo contundentes que haga falta. Sabemos también que este país necesita acuerdos, pero son acuerdos que el PP ha impedido”.
Vázquez y López han comparecido ante los medios tras ser ratificados por aclamación como candidatos a las elecciones gallegas y vascas del 21 de octubre. Toda la reunión es a puerta cerrada. Incluido el discurso de Rubalcaba por primera vez en 12 años, para “fomentar el debate interno”, según su equipo de dirección.
Los dos candidatos han rechazado con delicadeza la propuesta que traía al comité federal el madrileño Tomás Gómez, y en la que ha insistido esta mañana ante las cámaras: exigir al Gobierno un referéndum sobre el rescate, si finalmente lo hay. Gómez lo ha comparado con el referéndum sobre la entrada en la OTAN que convocó Felipe González en 1986. “La política tiene sus tiempos. En este momento el Gobierno tiene que pasar por el Parlamento para tomar esas decisiones”, se ha desmarcado Patxi López. Vázquez ha coincidido: “En este momento hay que apostar por la vía de los Parlamentos, los representantes legales de los ciudadanos”.
El propio Rubalcaba se mostró en contra de la propuesta del referéndum hace dos días; tampoco la va a apoyar Andalucía, la principal federación del PSOE, según ha confirmado a este periódico su número dos, Mario Jiménez; ni la federación valenciana, según ha adelantado su secretario general, Ximo Puig.
El secretario general de los socialistas extremeños, Guillermo Fernández Vara, ha sido más ambiguo: ha dicho que ahora mismo la vía debe ser la parlamentaria, pero ha añadido: "Si se produce una política de hechos consumados y no se debate en España, hay que pedir moción de confianza al señor Rajoy; y, solo en caso de que no quisiera, sería planteable otra cosa".
Patxi López y el "raca-raca soberanista"
El lehendakari y candidato socialista a la reelección, Patxi López, ha asegurado que necesita cuatro años más "para seguir cambiando Euskadi" y no volver a los tiempos de "fractura" de la sociedad vasca que, a su juicio, supuso la gobernabilidad del PNV."El PNV está volviendo a poner encima de la mesa su viejo raca-raca soberanista, un Plan Ibarretxe con otro nombre, que es un plan independentista a plazos que lo que hace es dividir y clasificar a los vascos", ha dicho, informa Europa Press.
Según ha puesto de relieve, durante estos tres años y medio en el poder, su Ejecutivo ha conseguido principalmente que ésta haya sido "la legislatura de la paz y la libertad". "Hemos conseguido, por fin, acabar con el ciclo de la violencia terrorista de ETA y conquistar ese sueño colectivo negado durante 40 años", ha subrayado.
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