El país sudamericano se enfrentó al FMI, ante la queja del organismo de que la nación debería corregir la metodología para el cálculo de la inflación antes de finalizar 2013
Publicado por Felipe Gazcón 

El gobierno de Cristina Fernández ha estado bajo presión por parte de los acreedores, para que pague una deuda total de mil 440 millones de dólares. Foto: Reuters

Argentina: una economía en duda

Publicado por Felipe Gazcón 

CIUDAD DE MÉXICO, 5 de abril.- Argentina vive una economía de ficción debido a la manipulación de importantes indicadores macroeconómicos, como la inflación y el crecimiento, con lo que logra ahorros al pagar menores tasas de interés a los tenedores de bonos, además de que mantienen una política de congelamiento de precios y un control del mercado cambiario.
Datos oficiales de Argentina indican que la inflación se ubicó en 2012 en 10.8%, menos de la mitad de lo calculado por consultoras privadas, que estiman una tasa de 25.6 por ciento.
El maquillaje de cifras ha llevado al gobierno argentino a un enfrentamiento con el FMI. El organismo emitió el primero de febrero de este año “una moción de censura” al país sudamericano y le instó a corregir su metodología de inflación más tardar el próximo 29 de septiembre.
A pesar de que la medida del FMI podría significar la antesala de sanciones como, por ejemplo, la suspensión del derecho a voto en el organismo, y la negativa de nuevos préstamos, la amonestación fue rechazada por el gobierno argentino.
La propia embajadora de la nación sudamericana en México, Patricia Vaca Narvaja, comentó en una entrevista con Excélsior, el 25 de febrero, que su país no necesita del dinero del FMI, por lo que no temía a ser sancionada. Además reprochó que la institución tampoco brindó buenos indicadores que anticiparan las crisis de Estados Unidos y Europa. No obstante, reconoció que Argentina evaluaría la metodología.
Germán Rojas, director de la licenciatura en Economía del ITAM, expresó que “los datos que está presentando Argentina, parecen ser manipulados.
“Ellos tienen un gran problema de deuda, de inflación, no están ingresando divisas, por lo tanto tienen un tipo de cambio controlado, entonces no sabemos cómo están las cosas, pero todo el mundo piensa que en cualquier momento entrará otra vez en otra especie de corralito”.
“Parece ser que el gobierno manipula los datos, diría que están manipulando los datos y los analistas que vemos las cosas de fuera no sabemos qué está pasando”, enfatizó Rojas.
Manipulación
Joaquín Cottani, economista de Citrigruop, explicó en un análisis que la inflación argentina reportada por congresistas aumentó en enero a 26.5%. En su estudio publicado en el Global Economic Outlook and Strategy de Citigroup, Cottani estimó que la inflación no oficial de Argentina se acelerará este año en 30 por ciento.
El economista Heinz Mewes, expresó a la cadena alemana Deutsche Welle que “no hay duda que el gobierno manipula los datos a través del Instituto Nacional de Estadística y Censos”.
Dijo que con la tasa de inflación baja, el gobierno ahorra dinero, ya que el país emitió bonos con un rendimiento referenciado a los precios al consumidor.
Incumplimiento
Argentina corre el riesgo de declararse en default en los próximos días, si un juez de Nueva York le ratifica un fallo que le ordena pagar mil 440 millones de dólares a sus acreedores de una deuda por 11 mil millones, que arrastra desde 2001.
En ese año declaró la mayor suspensión de pagos de la historia de un país, al incumplir con un pasivo de 82 mil millones de dólares. El 93 por ciento de esas deudas fueron canjeadas por títulos públicos que valían entre un tercio y la mitad de su valor original. El 7% restante está en manos de inversionistas que litigan contra Buenos Aires en tribunales de EU, Europa y Japón l para recuperar el valor de los bonos.
Uso de reservas
Uno de los desaciertos del gobierno argentino, fue la solicitud en enero de 2010 de la renuncia del titular del banco central, Martín Redrado, por resistirse a ceder reservas para pagar deuda.
Ayer, el país canceló los servicios de deuda con organismos internacionales y de deuda externa por 2,335 millones de dólares mediante las reservas del banco central