EL PAN SE QUEDA
Por Ricardo Alemán.
*Condicionan su permanencia en el Pacto por México.*Exigen cabezas de funcionarios veracruzanos.
Al
parecer, en el PAN todavía queda algo de amor por la vida. Es decir, no son del
todo suicidas.
¿Por
qué?
Porque
como se esperaba, la permanencia del PAN en el Pacto por México resistió las
amenazas de un
sector
de la Comisión Política del CEN del PAN –el del Calderonismo—; aquel que
buscaba la salida de los azules del acuerdo entre el PRI, PAN y el PRD.
Esta
tarde, parte del Comité Ejecutivo de Acción Nacional se reunió con el objetivo
de, entre otras cosas, definir si el partido permanecería, o no, en el Pacto
por México. Al mismo tiempo, los albiazules hicieron lo posible por reorientar
su relación con el gobierno federal.
En
otras palabras, los panistas marcaron la ruta de acción que seguirán al menos
hasta el proceso electoral del siete de julio; al tiempo que trabajaron en las
letras chiquitas del contrato que firmaron con la administración de Enrique
Peña a finales del año pasado.
Luego
de esta discusión –tal como dicta el "librito de la política"–, se
decidió que si bien el PAN regresará a la mesa del Pacto por México, lo harán
bajo sus condiciones.
¿Y
cuáles son estas cláusulas?
Una
"sanción real" a los 57 funcionarios públicos involucrados en el
escándalo de los apoyos electorales mal empleados.
Es
decir, que todo indica que los azules dirigirán sus ataques contra el gobierno
de Veracruz que, hasta ahora, había salido bien librado del escándalo por el
supuesto uso electoral de los programas de asistencia social.
En
otras palabras, que luego de sentar en el banquillo de los acusados a la
secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles; el panismo irá en pos de más
beneficios.
Vayamos
por partes.
Como
seguramente recuerdan, las grabaciones y vídeos que exhibían a los funcionarios
federales y estatales que condicionaban apoyos por votos, cobraban de la nómina
de SEDESOL y otros del gobierno de Veracruz.
Luego
entonces, tras hacer que Robles sudara la gota gorda durante su comparecencia
en el Senado, todo indica que es turno a Javier Duarte, gobernador de Veracruz.
Y
tal parece que en el caso veracruzano no se conformarán con una comparecencia
ante el Congreso, ¡no..! esta vez persiguen la caída de algunas
cabezas.
Y
es que, de jugar sus cartas como es debido, los azules podrían
consolidar su presencia e influencia en el pacto; además de hacer
tambalear la administración veracruzana y, en una de esas, recuperar posiciones
en el estado.
Lo
anterior, evidentemente, no es un asunto menor. Sobre todo porque Veracruz es
una de las principales reservas de votos para el PRI.
Como
sea, todo indica que el panismo ha sabido aprovechar la coyuntura. No
sólo se mantienen en el Pacto –con lo que resguardan la simpatía de parte de la
población a quien agrada la presencia del PAN en el acuerdo–, además acotaron
el trato con los tricolores e incluso podrían convertir este episodio en
una victoria electoral.
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