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Todos ellos perdieron la vida ayer en la maratón de Boston. Al menos 13 de las personas tuvieron que ser sometidas a operación para amputar extremidades. El balance de heridos llega ya a los 170.
Primero conocimos a Martin Richard, un niño de ocho años.
Pero no fue la única vida perdida en Boston. También murió Krystle
Campbell, una joven de Boston de 29 años. La tercera víctima es una
estudiante china del que a petición de la familia, no se van a facilitar
datos, según fuentes de la embajada china.
Poco antes, la Universidad de Boston informó de que una de
las tres víctimas mortales era una estudiante de este centro, pero
tampoco quiso precisar su identidad porque no tenía el consentimiento de
la familia. Otro ciudadano chino ha resultado herido y se encuentra
estable después de haber sido intervenido quirúrgicamente, según el
comunicado.
Miles de ciudadanos chinos han expresado sus condolencis: «El terrorismo no conoce fronteras.
Las víctimas no se limitan a una sola nación. Juntos condenamos,
juntos guardamos el luto», escribía uno de los internautas.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores chino
manifestó su "profunda preocupación" a la familia de la joven fallecida y
también por el estado de salud de otra estudiante china que resultó
herida en los ataques, Zhou Danling, aunque la portavoz ministerial Hua
Chunying aseguró que su vida no corría peligro.
Zhou y la estudiante fallecida, ambas estudiantes de la
Universidad de Boston, eran amigas y se encontraban viendo el maratón
cerca de la línea de meta cuando se produjeron las dos explosiones.
La portavoz Hua señaló que el Consulado de China en Nueva
York coopera con las autoridades estadounidenses en la atención a los
familiares de las víctimas.
Las autoridades norteamericanas habían identificado
previamente a un niño de ocho años, Martin Richard, y a una mujer de 29,
Krystle Campbell --ambos originarios de Boston--, entre las víctimas
mortales de los atentados, que causaron tres muertos y 176 heridos,
muchos de ellos con amputaciones.
Una hija ejemplar
Patricia Campbell llora la muerte de su hija: «Era una hija ejemplar y una gran trabajadora», explica a «The Boston Globe».
«Esto no tiene sentido», dice antes de tener que cortar el discurso de homenaje a su hija y comenzar a llorar.
Su abuela dijo de ella que «Siempre tenía tiempo para la
familía. Era de esas personas que siempre estaba haciendo algo bueno por
alguien», explicó la anciana que pasó 2 ños bajo el cuidado de su
nieta. «Ella se mudó a mi casa y me cuidó tras una operación
complicada», explicó.
El comisario de la Policía de Boston, Ed Davis, ha
explicado ante la prensa que las explosiones se produjeron sin previo
aviso en torno a las 14.50 (hora local) del lunes, de forma simultánea y
a escasas decenas de metros de distancia en la calle Boylston. El
presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha informado de que las
autoridades federales están investigando el atentado como un "acto
terrorista".
Según las autoridades médicas, los heridos han sido
atendidos en once hospitales de toda el área de Boston, y al menos 13 de
las víctimas tuvieron que ser sometidas a operación para amputar
extremidades.
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