01 enero, 2008

Las FARC suspenden liberación de rehenes

CARACAS.— El presidente venezolano Hugo Chávez dijo que la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) le comunicó en un mensaje que las operaciones militares de las autoridades colombianas impidieron la liberación de los tres rehenes que ofrecían entregar, lo que fue rechazado por su par Alvaro Uribe.

Leyendo una carta que le habría enviado el secretariado de las FARC, Chávez dijo por la televisión estatal de Venezuela que los rebeldes argumentaron que "los intensos operativos militares en la zona [donde serían liberados] nos impiden por ahora entregar a usted, como era nuestro deseo" a los cautivos.

Así queda frustrada la esperada liberación de la ex diputada Consuelo González, Clara Rojas junto a Emmanuel, de tres años —hijo que engendró en cautiverio con un guerrillero— prometida por las FARC al presidente venezolano o un representante suyo.

"Estamos seguros que tanto usted y los comisionados interesados (en la entrega de los rehenes) entenderán está situación... insistir en ello en estas condiciones sería poner en riesgo" la vida de los rehenes "y de los mismos guerrilleros para cumplir esta misión", añadió la misiva.

Al respecto Chávez comentó que no se va a "abortar la misión".

"Lo que pudiera cambiar es la modalidad. El operativo que hemos estado desarrollando pudiera pasar o transfigurarse en otra opción, en opciones clandestinas, que son sumamente riesgosas", afirmó.

El presidente Alvaro Uribe sostuvo en una conferencia de prensa que las autoridades militares "han explicado a los delegados humanitarios, al canciller Maduro, de Venezuela, que allí no hubo combates".

"Desconocemos el área [de entrega], tenemos la noción general de la geografía... [y] en esa área general no ha habido combate", afirmó el gobernante.

"No tiene disculpas el grupo terrorista de las FARC" por la demora, "quieren engañar a la comunidad internacional... mienten", destacó Uribe.

Uribe especuló que las FARC no complieron el compromiso "porque no tiene en su poder al niño Emmanuel", quien se encontraría en Bogotá bajo tutela de una institución gubernamental.

El mandatario solicitó a la abuela y tíos del niño que se practiquen un examen para comparar su ADN con el de un niño que está en manos de Instituto de Bienestar Familiar "para saber la realidad sobre esta hipótesis".

Minutos después, Chávez expresó su desconfianza sobre lo revelado por Uribe sobre el niño y afirmó que su colega sólo quiso desmontar el operativo humanitario.

"Conozco ese equipo [de asesores y funcionarios colombianos], inventan cosas... Tengo personalmente razones para dudar, ¿por qué hoy [por ayer] precisamente en Villavicencio, el presidente hace pública una hipótesis de que las FARC no tienen a Emmanuel?", se preguntó Chávez.

"Ojalá fuera cierta la hipótesis de Uribe, quedarían muy mal las FARC ante el mundo, una mentira", dijo a la televisora estatal. Opinó que su par se dedicó a "dinamitar todo ese proceso con una cortina de humo".

El anuncio de Chávez se produjo luego de esperar cuatro días que los rebeldes colombianos revelasen las coordenadas para desplegar una misión humanitaria, integrada por delegados de siete países, que permanecía congregada en la ciudad colombiana de Villavicencio.

El gobernante venezolano dijo "dudar" de la palabra del gobierno colombiano.

Pero le pareció "un poco cínica. Así me parece la declaración del comisionado de paz (de Colombia Luis Carlos Restrepo). Yo lo conozco bien, medias verdades, algunas manipulaciones, tengo razones para dudar de la palabra del gobierno de Colombia" respecto a la liberación de los rehenes, manifestó Chávez.

Horas antes en una conferencia de prensa en Villavicencio, Restrepo expresó: "Estamos acostumbrados a los engaños" de las FARC.

Las "FARC le mienten al país. Nosotros los conocemos desde hace 40 años... le faltan el respeto a todo el mundo", manifestó el comisionado, molesto por el retraso de la gestión humanitaria.

Desde el viernes, cuando Chávez envió los primeros dos de cuatro helicópteros a la ciudad colombiana de Villavicencio, a 75 kilómetros al sur de Bogotá, no hubo ninguna otra novedad, salvo la llegada del cineasta estadounidense Oliver Stone.

El ministro de Exterior venezolano Nicolás Maduro declaró el lunes en esa ciudad colombiana que la operación podría durar varios días más y abogó por "paciencia y nervios de acero".

Colombia prometió mantener su respaldo a la operación, permitiendo a Chávez usar su prestigio izquierdista ante las FARC para lograr un rápido retorno de los rehenes junto a sus familias, muchos de los cuales llevan varios días esperándolos en Caracas.

Los rehenes a ser liberados son parte de unos 45 que las FARC ofrecen liberar tras negociar un canje por cientos de guerrilleros presos.

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