17 abril, 2008

¿Qué tasa de crecimiento es lógica para China?

Por Andrew Batson

BEIJING — China anunció que el crecimiento de su economía continuó disminuyendo modestamente en el primer trimestre de este año. Junto con el panorama cada vez más pesimista de la economía mundial, el enfriamiento gradual está encendiendo el debate sobre cuán rápido necesita crecer China y qué velocidad puede sostener.

El Producto Interno Bruto de China creció un 10,6% con relación al año anterior en los primeros tres meses de 2008, un descenso de la tasa de crecimiento recientemente revisada de 11,9% para 2007, anunció esta semana la Oficina Nacional de Estadística de China.

La caída se produjo en gran parte a causa de un desempeño comercial más débil, además de las fuertes tormentas de nieve a principios del año. Sin embargo, la inflación, que según el primer ministro Wen Jiabao es la principal prioridad económica del gobierno, permaneció tenazmente alta.

La inflación en los precios minoristas cayó a 8,3% en marzo con relación a 2007, bajando ligeramente de 8,7% en febrero. Pero una medida de los precios al productor se aceleró a un alza de 8% en marzo frente a 6,6% en febrero.

La cifra de crecimiento para el primer trimestre fue más alta de la que pronosticaron casi todos los economistas. Esto puede darle un respiro al gobierno ante las presiones locales para que reduzca la inflación y empiece a estimular la economía.

Li Xiaochao, portavoz de la oficina de estadísticas, indicó que no había cambios en la tendencia cuando anunció los últimos datos. "La principal tarea de las políticas macroeconómicas actuales aún es impedir que los precios continúen subiendo", dijo, aunque agregó que el gobierno tratará de evitar causar una disminución "demasiado abrupta" del crecimiento económico.

[china]

Mientras que la alta inflación y el rápido crecimiento llevaron a los inversionistas a reducir las posibilidades de que el gobierno flexibilice sus políticas, el índice de referencia bursátil de China cerró el miércoles con una baja de 1,7%.

Tras el cierre del mercado, el Consejo de Estado de China reiteró ese mensaje, declarando que la inflación sigue siendo el principal problema económico del país pese al entorno mundial "complejo y difícil". El banco central también aumentó, por tercera vez este año, la cantidad de fondos que los bancos deben mantener en reserva.

Estas medidas forman parte de un paquete de políticas (que incluye una moneda más fuerte, aumentos de tasas de interés y restricciones a los préstamos bancarios), que el gobierno implementó el año pasado para frenar el alza de la inflación. Pese a que celebran los beneficios del rápido crecimiento, las autoridades reconocen que la expansión de casi 12% del año pasado era claramente insostenible.

Pero definir qué es sostenible es más peliagudo. Los economistas del país, que durante años han considerado que la tasa de crecimiento "normal" de la economía se situaba entre 8% y 9%, han comenzado a elevar esos estimados a alrededor de 10%. Con esta clase de impulso, es muy poco probable que China experimente una recesión tradicional. Pero aún hay temores de que un enfriamiento mundial pueda hundir la tasa de crecimiento de China muy por debajo de su potencial. "Para China, un crecimiento inferior a 8% debería considerarse una recesión", dice Li Zhikun, economista de China Jianyin Investment Securities en Beijing.

El Banco Asiático de Desarrollo advirtió recientemente que en el peor de los casos, un fuerte enfriamiento mundial junto con una alta inflación nacional y un hundimiento de los mercados financieros, causaría que el crecimiento de China cayera hasta el 7% este año.

No hay comentarios.: