07 julio, 2008

Miles de candidatos buscan votos en Brasil

Presidente de Brasil Luis Inacio Lula da Silva.
AP
Presidente de Brasil Luis Inacio Lula da Silva.

Cientos de miles de candidatos a alcaldes y concejales se lanzaron hoy a las calles de Brasil en el primer día de la campaña para las elecciones municipales de octubre, que muchos consideran un ''laboratorio'' para las presidenciales del 2010.

El próximo 5 de octubre los brasileños acudirán a las urnas para elegir a los alcaldes y concejales de las 5,563 ciudades del país, cargos para los que las autoridades electorales calculan que se han inscrito unos 400,000 candidatos.

El registro de candidaturas cerró este sábado, pero ahora la justicia electoral de cada municipio deberá depurarlo y determinar si existen aspirantes que no cumplen con todas las condiciones que establecen las leyes.

En Sao Paulo, la ciudad más poblada y rica del país y considerada la ''joya de la corona'' de los comicios, los principales aspirantes comenzaron sus actividades temprano, buscando un contacto directo con los electores.

Marta Suplicy, abanderada del Partido de los Trabajadores (PT), que lidera el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, inició su primer día de campaña en una iglesia de un acomodado barrio paulistano, donde acudió a misa, y luego visitó una feria popular.

Suplicy fue alcaldesa de Sao Paulo en el período 2001-2005, acaba de renunciar al cargo de ministra de Turismo para ser candidata y ha comenzado la campaña con 38 por ciento de intenciones de voto, según encuesta de la empresa Datafolha.

Su mayor rival será el ex gobernador de Sao Paulo y ex candidato presidencial del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) Geraldo Alckmin, a quien Datafolha le atribuyó un 31 por ciento de respaldo popular.

El candidato del más enconado adversario del gobierno de Lula también salió a la calle temprano y recorrió distintos barrios populares de la ciudad, donde tuvo encuentros personales con sus partidarios.

Las elecciones en Sao Paulo son las que reproducen de manera más fiel el escenario político nacional, tanto por la propia rivalidad entre el PT y el PSDB, como por la talla de los candidatos que ambos partidos han presentado.

Suplicy y Alckmin figuran entre los posibles aspirantes a la Presidencia en los comicios del 2010, a los que Lula no podrá presentarse pues está en su segundo mandato consecutivo y las leyes impiden una nueva reelección.

En ciudades como en Río de Janeiro y Belo Horizonte, segundo y tercer colegio electoral de Brasil, se da la extraña paradoja de que Lula y el PT se han decantado por candidatos distintos.

En Río de Janeiro, aunque su partido tiene su propio aspirante, Lula ha declarado un apoyo explícito al obispo evangélico Marcelo Crivella, del Partido Republicano Brasileño (PRB), que lidera el vicepresidente del país, José Alencar.

En Belo Horizonte, Lula se ha inclinado por favorecer una alianza entre el PT y el PSDB en torno a la candidatura de Márcio Lacerda, del Partido Socialista Brasileño (PSB), que ha sido rechazada por la dirección nacional de su partido.

Lacerda también es respaldado por Aecio Neves, uno de los más carismáticos líderes del PSDB y gobernador del estado de Minas Gerais, cuya capital es Belo Horizonte.

Neves tiene una estrecha relación con Lula, quien, según muchos analistas, intenta convencerle de abandonar el PSDB para postularse a la Presidencia en el 2010, pero como abanderado del actual Gobierno. En ese complicado ajedrez político de cara a las presidenciales del 2010, Lula deberá hacer el esfuerzo para evitar una fractura de su coalición, que integran once partidos de todas las tendencias.

No hay comentarios.: