Los nervios a flor de piel un día más en los mercados financieros. Aunque el dato de paro en EEUU parecía animar a consolidar las subidas, las presión bajista vuelve a instalarse y obliga al Ibex a borrar los avances superiores al 1% y entrar de nuevo en el terreno negativo.
Una vez celebrada la reunión del BCE, los inversores parecían quedarse sin apenas 'salvavidas' a los que aferrarse. La situación se complica además si las perspectivas apuntan cada vez con mayor determinación hacia una recaída en la recuperación de la primera economía mundial.
La crisis económica se combina con la financiera para crear una tormenta que desata el pánico entre los inversores. Después del severo correctivo con el que cerraron las bolsas europeas, Wall Street agravó las alertas. Su tropiezo se disparó en el Dow Jones desde el -2,5% del cierre en Europa hasta el -4,31% final.
Este diferencial negativo se ha reflejado desde la apertura en la renta variable europea. En sus primeros cruces, desde el Dax alemán hasta el Ftse británico han sufrido caídas adicionales superiores al 2%. En el caso del Mib italiano el castigo superaba el 3%.
Nada más iniciarse la jornada en los mercados, desde diferentes instituciones europeas se han sucedido los mensajes destinados a intentar suavizar la tensión. Desde el BCE ha llegado uno de los más alentadores. El máximo responsable del banco central belga, Luc Coene, asegura que en ningún momento el BCE ha vetado la compra de bonos de España e Italia, como no lo hizo con Grecia, Irlanda y Portugal antes de iniciar sus adquisiciones. Poco después el Gobierno irlandés aseguraba que el BCE podría acelerar sus compras, y los operadores daban la noticia de nuevas adquisiciones en la jornada de hoy, centradas en Irlanda y Portugal.
Pero ni el dato económico del día llegado desde EEUU, que hoy ha sido positivo, logra calmar a los mercados. El paro de la primera economía del mundo bajado ligeramente hasta el 91,% y su creación de empleo ha acelerado hasta los 117.000 nuevos puestos de trabajo. En ambos casos, los datos han sido superiores a los avanzados en las previsiones de los expertos.
Y pese a que la primera reacción del mercado ha sido alcista, con unos primeros de negociación en Wall Street en los que los indicadores subían más del 1%, ahora los indicadores caen de nuevo en el rojo y arrastran al Ibex, el mejor indicador en Europa. El selectivo español borra sus avances del 1% y lucha ahora por mantener el terreno positivo.
Al menos, el mercado de deuda pública ofrece un respiro a España. Los inversores frenan su desbandada de la deuda periférica. La prima de riesgo de España se aleja de los 400 puntos básicos, después de pulverizar récords esta mañana en 425 puntos. La de Italia, más de un año después, se sitúa por encima de la de España.
El CAC francés, que también optaba por las subidas, cotiza ahora plano y el Londres el FTSE agrava su caída ya al 2,5%. El DAX aleman cae con fuerza a esta hora y pierde ya un 1,5%.
Los dos valores con mayor ponderación del Ibex, Telefónica y Santander, a su vez dos de las compañías con mayor exposición a mercados internacionales, destacan entre los que reflejan más resistencia a las caídas.
Los analistas de Goldman Sachs han rebajado en bloque sus valoraciones sobre la banca española, pero aún así, otorga todavía potenciales de revalorización superiores al 45% en Santander y al 70% en BBVA.
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