WASHINGTON—El codirector de la comisión de derrame petrolero de Estados Unidos, William K. Reilly, viajará a Cuba la próxima semana para participar en la evaluación de los planes de ese país por desarrollar sus recursos petroleros, según ha conocido Dow Jones Newswires.
El viaje coincide con las inquietudes planteadas por legisladores de EE.UU. acerca de potenciales derrames de crudo conforme Cuba comienza perforaciones petroleras en altamar y expertos petroleros presionan al gobierno del presidente de EE.UU., Barack Obama, para que otorgue exenciones al embargo a la isla.
Associated Press
Una plataforma en el Golfa de México, Repsol planea construir una plataforma similar en las aguas al norte de Cuba.
El viaje, que incluirá una delegación de expertos en perforación y ambientalistas estadounidenses, coincide con las gestiones de Cuba por desarrollar sus recursos petroleros en altamar como una manera de independizarse de las importaciones procedentes de Venezuela. Las autoridades de EE.UU. creen que las aguas de Cuba podrían contener más de 5.000 millones de barriles of petróleo.
Los intentos de Cuba por explotar su reservas petroleras marítimas comenzarán en los próximos meses, cuando se espera que un consorcio encabezado por la compañía española Repsol YPF S.A. comience a perforar un pozo a una profundidad superior a 1.500 metros en la costa norte del país. Si Repsol encuentra petróleo, ello podría desencadenar una rápida carrera por intensificar la producción en aguas cubanas.
La delegación que va a Cuba, que incluye a la Asociación Internacional de Contratistas de Perforación y el Fondo de Defensa Ambiental, tiene la misión de determinar los planes de largo plazo del país para aprovechar sus recursos petroleros e identificar medidas para garantizar la seguridad y la protección ambiental. Tienen previsto partir el lunes.
El proceso de perforación petrolera a miles de metros de profundidad en el agua es "inherentemente arriesgado", dijo Daniel Whittle, director de programa para Cuba del Fondo de Defensa Ambiental y miembro de la delegación. "Creemos que es imperativo que si y cuando Cuba perfore, lo haga bien".
Reilly, codirector de la Comisión Nacional del presidente Barack Obama sobre el derrame petrolero y perforación marítima de Deepwater Horizon de BP, ayudó a elaborar un informe a comienzos de este año que recomendó que funcionarios estadounidenses colaboren con Cuba y México para crear pautas compartidas para la perforación petrolera en el Golfo. La comisión de derrame petrolero cesó operaciones en marzo tras terminar su trabajo.
El intento de Cuba por promover la perforación en sus aguas presenta una situación espinosa para legisladores, reguladores y compañías de EE.UU.
Entre los críticos más feroces de los planes de Cuba están legisladores de estados de la costa estadounidense sobre Golfo de México, quienes están planteando interrogantes acerca de la capacidad del país por responder a derrames petroleros y los riesgos de que el crudo bañe las costas estadounidenses. El representante Vern Buchanan, republicano de Florida cuyo distrito está frente al golfo de México, presentó una iniciativa de ley este año para permitir que el secretario del Interior deniegue concesiones de exploración y desarrollo petrolero a compañías que hacen negocios con Cuba.
"Estados Unidos no verá una gota de ese petróleo", dijo Max Goodman, portavoz del representante Buchanan. "Y hemos descubierto por el Deepwater Horizon que un derrame petrolero puede devastar una economía regional y representar un daño a largo plazo a nuestros recursos naturales".
Repsol explorará en aguas que están a mayor profundidad que las de la plataforma de Deepwater Horizon perforaba en el momento en que explotó el año pasado. Repsol usará una perforadora de fabricación china que recientemente partió de Singapur hacia aguas cubanas. Se espera que la plataforma llegue en noviembre o diciembre.
La plataforma, conocida como Scarabeo 9, fue construida de conformidad al embargo de EE.UU. y Repsol ha dicho que seguirá pautas de seguridad estadounidenses, dijo el representante de Repsol, Kristian Rix.
"Estamos convencidos que tenemos el personal y los materiales correctos para perforar con seguridad y éxito en la zona", dijo Rix.
Si se halla petróleo, Cuba tendría una mayor probabilidad de reducir su dependencia energética de Venezuela. En 2009, el país produjo aproximadamente 50.000 barriles de petróleo por día de yacimientos marítimos y costeros, dependiendo de importaciones para otros 130.000 barriles con el fin de satisfacer niveles de consumo, según la Administración de Información de Energía.
Debido a los riesgos de un derrame de crudo, expertos en petróleo y gas están exhortando al gobierno de Obama a otorgar exenciones del embargo para permitir que compañías y expertos de EE.UU. respondan a un desastre. Compañías estadounidenses como Helix
Energy Solutions han emprendido medidas enérgicas para la creación de sistemas de contención de derrame petrolero después del de BP.
Permitir que compañías y expertos estadounidenses respondan a un derrame de crudo en Cuba estaría dentro de los intereses de EE.UU. dada la proximidad de las perforaciones a las costas estadounidenses, dijo Jorge Piñón, ex presidente de Amoco Oil Latin America e investigador visitante de la Universidad Internacional de Florida.
"Hay una compañía experimentada que está haciendo el trabajo (en Cuba)", dijo Piñón. "Lo que falta es que, en el caso de una emergencia, Repsol y los otros operadores puedan acceder a los recursos" en EE.UU.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario