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La noticia se ha consumado. MF Global, operador de derivados dirigido por Jon Corzine, se ha convertido en la primera víctima financiera de la crisis de deuda soberana en Europa y se ha declarado en quiebra tras solicitar este lunes la protección del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de EEUU ante el Tribunal de Bancarrotas de Manhattan. Dexia, la crónica de un descenso al infierno.
Esta mañana, la Reserva Federal de Nueva York suspendió sus operaciones con MF Global y se suspendió la cotización de las acciones de la compañía.
El consejo de la firma, que ha registrado pérdidas récord por su exposición a la deuda soberana europea, se reunió este fin de semana para considerar las opciones, incluida una posible venta.
La suspensión para realizar negocios con la Fed de Nueva York permanecerá hasta que sea capaz de mostrar que puede cumplir con sus responsabilidades como primary dealer (firmas que trabajan directamente con las autoridades para crear mercado de deuda).
¿Quién es Corzine?
La presión aumenta para Corzine que llegó a MF Global en marzo de 2010. Ex de Goldman Sachs y antiguo Senador, sus ambiciones políticas se truncaron hace casi dos años cuando fue derrotado para la reelección como gobernador de New Jersey, según recoge el blog Deal Book, del New York Times.
Su primera temporada en Wall Street terminó con su expulsión de Goldman Sachs. Tras la crisis financiera asiática de 1998, una serie de pérdidas en el último trimestre de ese año provocaron la salida de Corzine de la entidad en enero de 1999.
MF Global ha estado en conversaciones con al menos cinco posibles compradores de toda o parte de la empresa, según publica Bloomberg citando a fuentes cercanas al broker.
Probablemente, el papel de Corzine en la empresa ha llegado a su final, si bien se espera que reciba una indemnización por despido de cerca de 12,1 millones de dólares.
Compra de deuda soberana
MF Global hizo grandes apuestas sobre los bonos soberanos emitidos por países europeos como Italia, Portugal, España e Italia el año pasado, pensando que obtendría mucho dinero.
Su futuro permanecía en el aire desde que la semana pasada se conocieran sus inversiones fallidas en deuda soberana de la zona euro y una exposición agregada a bonos de la periferia europea por importe de 6.300 millones de dólares (4.500 millones de euros). Fue entonces cuando se desplomó un 67% en bolsa.
En el tercer trimestre, la compañía anunció unas pérdidas de 191,6 millones de dólares y tanto Moody´s como Fitch decidieron rebajar su calificación al estatus de basura.
Al solicitar la protección de la Ley de Quiebras, la firma financiera reconoció una deuda por importe de 39.680 millones de dólares (28.343 millones de euros), mientras que sus activos alcanzaban un valor de 41.005 millones de dólares (29.289 millones de euros).
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