Ahora que se abre la temporada de colectas nacionales, aporta ideas. Los políticos están sedientos... ¡aunque lo ignoren!
Pedro Ferriz
Claro que sé que “debemos hacer un mejor país para nuestras familias”, como vehemente arenga Josefina. Por supuesto entiendo que “una elección sólo funciona en el marco de la democracia” como bien acierta Enrique Peña Nieto. Por supuesto que “vivimos los efectos de una crisis derivada del predominio de un grupo oligárquico”, reflexión que López Obrador emplea para abrirnos los ojos.
Lo que queda pendiente es saber qué hay de nuevo en el aporte de ideas refrescantes, contundentes, aplicables y valientes para un mercado hasta ahora inexistente, que los mexicanos queramos “comprar” en aras de llevar al país a un escenario que rompa con la pobreza del ayer para proponer la riqueza de mañana.
Jim O´Neill, Director de Fondos de Inversión de Goldman Sachs, nos asegura que México se convertirá en 2020 en la séptima economía más grande del mundo y aportará el 7.8 por ciento del Producto Interno Bruto Global... Más que Rusia y la India. Durante el foro de negocios “Mexico Week”, el directivo de la banca de inversión dijo ante promotores británicos que los mexicanos “deben estar en el radar”, ya que en los próximos años construirán una de las economías de mayor crecimiento planetario. México es parte de los llamados “growth markets”, un concepto que O´Neill propuso en 2010 para referirse a los países que más crecerán en la próxima década. ¿ Lo sabrán los candidatos? El creador del concepto “economía BRIC” (Brasil, Rusia, India y China) afirmó que la razón por la que hace una década no incluyó a México en este bloque de países emergentes, es porque no estábamos creciendo al ritmo de China o de Brasil. No obstante ahora piensa que los cambios estructurales del país llegarán “irremediablemente”. Explicó que hay 15 variables para medir el crecimiento. Destacan: leyes, corrupción, estabilidad política, déficit fiscal, educación, inversión, internet, celulares, computadoras y apertura económica. Reconoció que México debe seguir impulsando reformas al sector energético porque “hay una percepción de que la forma en que ha usado el petróleo, no ha sido tan benéfica para el país”... Y sí, sin el ánimo de ser denostativo, entiendo la diferencia entre Ciudad del Carmen y Dubai. Aunque también me atrevo a resaltar que en lo que sí, no hemos fallado, es en hacer Jeques como Maktum bin Rashid al-Maktum que junto a sus hermanos, el jeque Mohamed y el jeque Hamdan decidieron reinvertir los beneficios del petróleo en la construcción de una futurista urbe. Centro financiero en otro polo del mundo, en clara competencia con sus ahora similares: Hong Kong o Singapur. Igualito que lo planeado por Carlos Romero Deschamps, ahora flamante diputado plurinominal propuesto por Peña Nieto. Digo que Romero lo tiene planeado, no que lo haya hecho. Sé que está en sus planes convertirse algún día en “¡el gran reformador petrolero de México!”. Si no, al tiempo... van a ver. En el objetivo para hacer el milagro de Dubai en terrenos xochimilcas están contemplados otros hiper multi millonarios como Elba Esther Gordillo, Joaquín Gamboa Pascoe y algunos colaboradores de los candidatos a la Presidencia como Luis Miranda, René Bejarano y Fernando Larrazabal. Miembros todos del “Consejo Benefactor de México”. Una ONG: Onerosa Nomenclatura del Gasto. Una especie de Secretaría del Abuso.
Estamos a nada de que comience el espectáculo político. Se me cuecen las habas por saber quién de los candidatos incide más en el terreno de las ideas manidas. Lo excitante de esto, es que siempre existirá la posibilidad de que gane el más obvio. Aunque sé que eso sólo es posible en democracias como la nuestra. Donde cabe lo ridículo, lo payo y lo surrealista. Todo, mientras no nazca un movimiento que rechace abierta, explícita y contundentemente, este oprobioso círculo de la mediocridad.
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