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El dato fue peor de lo previsto. No obstante, la tasa de desempleo se mantuvo sin cambios en el 8,2%. En este caso, la cifra sí está en línea con las previsiones de los expertos consultados por Bloomberg.
El decepcionante dato de empleo se suma a nuevas preocupaciones sobre la salud de la economía de Estados Unidos en un momento en que el crecimiento se está desacelerando en todo el mundo. De hecho, en su última reunión la Reserva Federal de EEUU revisó al alza, para mal, sus previsiones de paro para este año y, ante la debilidad económica, no cerró la puerta a la posibilidad de impulsar nuevos estímulos.
Además, de publicar el dato de abril, el Departamento de Empleo ha revisado al alza hoy la creación de empleo correspondiente a mayo, hasta los 77.000 puestos de trabajo, frente a la lectura inicial de 69.000. También se ha revisado, pero a la baja, la cifra de abril, desde los 77.000 empleos creados hasta los 68.000.
El informe muestra que el sector privado representó el grueso de las contrataciones, con 85.000 nuevos puestos. El sector público destruyó 4.000 empleos.
Por sectores de actividad, los servicios profesionales crearon 47.000 empleos, el sector sanitario 13.000 y el sector manufacturero, otros 11.000.
12,7 millones de desempleados
El número total de desempleados en Estados Unidos se sitúa en los 12,7 millones de personas. El grupo de parados de larga duración (aquellos sin trabajo durante 27 semanas o más) está formado por 5,4 millones de personas, que representan el 41,9% de todos los desempleados. El porcentaje de población activa descendió del 63,8% de mayo al 58,6% en junio.Sólo una pequeña parte de los más de 8 millones de empleos perdidos durante la recesión han sido recuperados. Los economistas calculan que Estados Unidos tendría que añadir unos 250.000 empleos al mes durante al menos dos años para que la tasa de paro regresara a su nivel previo a la recesión, alrededor del 6%.
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