NO QUE NO..? EMPEZÓ LA CRISIS POST ELECTORAL

Por Ricardo Alemán

En conferencia de prensa, en candidato del Movimiento Ciudadano, Andrés Manuel López Obrador, desconoció el resultado de la elección, aseguró que existía un fraude generalizado y dijo que todo el Estado se habría volcado para la compra de votos.

Es decir, que López Obrador dio la razón a sus detractores y a todos los que adelantaron que el de Tabasco haría hasta lo imposible con tal de tumbar la elección.

Como quizá algunos recuerdan, durante meses, el candidato de la llamada izquierda fue perseguido, cuestionado y comprometido a respetar el resultado de la elección. Pero nuevamente, López Obrador engañó a todos al suscribir un acuerdo que probablemente nunca pensó cumplir.

Y es que, igual que hace seis años, Andrés Manuel López Obrador signó un pacto en donde aseguró que acataría la voluntad de las mayorías expresada a través del voto. No obstante, del mismo modo en que hizo hace seis años, Obrador "mandó al diablo" la confianza de los electores y el acuerdo entre los principales acuerdos políticos. Ya que, al parecer, no existe un acuerdo válido, respetable y/o legal, que contravenga los intereses de Andrés Manuel y su claque.

La primera vez que López Obrador rompió el llamado Pacto de Civilidad, lo hizo por una diferencia de 0.56%; cuando su "verdugo" –Felipe Calderón–, apenas le superó en las urnas de votación. Ahora, Obrador intenta repetir la hazaña con un porcentaje en contra de unas 6.5 unidades.

Al parecer, desde la óptica de Andrés Manuel, no hay distancia ni acuerdo que valgan. Y por segunda ocasión, el dos veces candidato presidencial pondrá en duda el funcionamiento y la efectividad del Estado mexicano; la misa institución que ha intentado presidir –sin éxito– en los últimos seis años.