guerra civil en Siria
Fuentes antigubernamentales aseguran que muchos de los cadáveres hallados en Daraya muestran signos de haber sido ejecutados por las tropas del régimen
Agencias
Ammán
La tragedia que se intuía tras las batallas de los últimos días en
Daraya, un suburbio al suroeste de Damasco, ha comenzado a tomar forma.
Este sábado, los rebeldes sirios han denunciado el hallazgo de más de
300 cadáveres, un día después de que las fuerzas de Bachar el Asad recuperaran la plaza,
en medio de una ofensiva para retomar el control de los alrededores de
la capital. Los opositores aseguran que muchos cadáveres tenían signos
de haber sido "ejecutados" por los soldados. Descubrimientos macabros
como este se han multiplicado en el país desde hace semanas.
Daraya une así su nombre al de localidades sirias tristemente famosas por haber sido escenario de otras matanzas, como Hula (108 muertos, según la misión de Naciones Unidas) y Treimse (alrededor de 200 víctimas mortales). Según los opositores Comités de Coordinación Local (CCL), se trata de la mayor masacre desde el inicio de la rebelión contra El Asad, en marzo de 2011. Los combates de Daraya se inscriben en el contexto de la ofensiva generalizada del Ejército sirio, en curso desde hace días, contra el cinturón meridional de Damasco, donde resisten numerosos focos rebeldes.
Según el Observatorio Sirio deDerechos Humanos
(OSDH), con sede en Londres, al menos 320 cuerpos han sido hallados en
Daraya desde el sábado, pero la mayoría de las víctimas habrían muerto
días antes, en el transcurso de la operación de castigo que el Ejército
inició hace cinco días para expulsar a los rebeldes de la localidad. El
mayor número de cadáveres -hasta 156, según la red opositora Sham- fue
hallado en la mezquita de Abu Suleimán al Durani. Un vídeo colgado este
sábado en YouTube cuya autenticidad no ha podido ser probada muestra en
lo que parece ser el sótano de un edificio decenas de cadáveres
alineados, la mayoría de hombres y con señales de haber sido ejecutados,
mientras el autor de la grabación acusa a los shabiha (matones del régimen) de la matanza.
Abu Kinan, un activista de Daraya, detalla que muchas de las víctimas estaban en casas y en refugios en sótanos, por lo que parece que fallecieron tiroteadas en una operación casa por casa. "En las últimas horas, se han encontrado 122 cadáveres. Parece que dos docenas de personas murieron por impactos de los francotiradores y el resto fueron ejecutadas de modo sumario con pistolas a corta distancia", explica en declaraciones a la agencia Reuters. "El Ejército de El Asad ha cometido una masacre en Daraya". La ausencia de informadores independientes sobre el terreno hace imposible confirmar el balance de víctimas.
El Comité de Coordinación de Daraya ha dicho en un comunicado que entre los cadáveres encontrados con un tiro en la cabeza había ocho miembros de la familia Al Qassaa: tres niños, su padre y su madre y otros tres parientes.
Mohamamad Hur, otro activista de Daraya, ha dicho que 36 cadáveres de hombres jóvenes fueron hallados por la mañana en un edificio, junto con numerosas personas gravemente heridas que no podían ser trasladadas a hospitales de la zona porque el Ejército los había ocupado. "Estamos identificando los cadáveres y documentando cómo murieron. Los primeros indicios señalan que la mayoría recibió disparos a corta distancia en la cara, cuello y cabeza, estilo ejecución", explica Hur. "Las mujeres de dos familias dicen que los soldados dispararon a sus hermanos delante de ellas".
Un reciente informe de la ONU confirmó que ambos bandos han perpetrado ejecuciones sumarias -un crimen de guerra-, pero también que las tropas de El Asad y las milicias de shabiha han cometido más que los rebeldes.
El suburbio de Daraya, una ciudad de clase trabajadora de mayoría suní próxima a Damasco y con una población de 200.000 habitantes, se había convertido en un foco de rebeldes que habían atacado recientemente a las tropas de El Asad, que intenta sofocar desde hace 17 meses una rebelión que degenerado en guerra civil. Sobre la operación en la localidad, la agencia estatal de noticias Sana informó: "Nuestras heroicas fuerzas armadas han limpiado Daraya de restos de grupos terroristas que han cometido crímenes contra los hijos del pueblo, los han aterrorizado y han saboteado y destruido propiedades públicas y privadas".
La Agencia de la ONU para los Refugiados informó este viernes de que el número total de sirios refugiados en países extranjeros a causa del conflicto ha superado los 200.000. Según el OSDH, 25.000 personas han muerto en Siria desde el inicio de la revuelta contra el régimen, frente al cómputo de 18.000 que ofrece la ONU.
En el plano político, el vicepresidente sirio, Faruk al Shara, ha aparecido este domingo en Damasco por primera vez desde hace aproximadamente un mes, después de que en las últimas semanas se sucedieran los rumores sobre su deserción del régimen y su huida del país. Al Shara participó en una reunión con representantes del Parlamento iraní. Pocas horas después, el presidente El Asad reafirmó que su régimen derrotará "a cualquier precio" el "compló" extranjero dirigido contra su país, informó la agencia Sana. "El pueblo sirio no permitirá que el compló triunfe y alcance sus objetivos", y le derrotará "a cualquier precio", indicó el presidente sirio al recibir a un emisario iraní en Damasco, según Sana.
Daraya une así su nombre al de localidades sirias tristemente famosas por haber sido escenario de otras matanzas, como Hula (108 muertos, según la misión de Naciones Unidas) y Treimse (alrededor de 200 víctimas mortales). Según los opositores Comités de Coordinación Local (CCL), se trata de la mayor masacre desde el inicio de la rebelión contra El Asad, en marzo de 2011. Los combates de Daraya se inscriben en el contexto de la ofensiva generalizada del Ejército sirio, en curso desde hace días, contra el cinturón meridional de Damasco, donde resisten numerosos focos rebeldes.
Según el Observatorio Sirio de
Abu Kinan, un activista de Daraya, detalla que muchas de las víctimas estaban en casas y en refugios en sótanos, por lo que parece que fallecieron tiroteadas en una operación casa por casa. "En las últimas horas, se han encontrado 122 cadáveres. Parece que dos docenas de personas murieron por impactos de los francotiradores y el resto fueron ejecutadas de modo sumario con pistolas a corta distancia", explica en declaraciones a la agencia Reuters. "El Ejército de El Asad ha cometido una masacre en Daraya". La ausencia de informadores independientes sobre el terreno hace imposible confirmar el balance de víctimas.
El Comité de Coordinación de Daraya ha dicho en un comunicado que entre los cadáveres encontrados con un tiro en la cabeza había ocho miembros de la familia Al Qassaa: tres niños, su padre y su madre y otros tres parientes.
Mohamamad Hur, otro activista de Daraya, ha dicho que 36 cadáveres de hombres jóvenes fueron hallados por la mañana en un edificio, junto con numerosas personas gravemente heridas que no podían ser trasladadas a hospitales de la zona porque el Ejército los había ocupado. "Estamos identificando los cadáveres y documentando cómo murieron. Los primeros indicios señalan que la mayoría recibió disparos a corta distancia en la cara, cuello y cabeza, estilo ejecución", explica Hur. "Las mujeres de dos familias dicen que los soldados dispararon a sus hermanos delante de ellas".
Un reciente informe de la ONU confirmó que ambos bandos han perpetrado ejecuciones sumarias -un crimen de guerra-, pero también que las tropas de El Asad y las milicias de shabiha han cometido más que los rebeldes.
El suburbio de Daraya, una ciudad de clase trabajadora de mayoría suní próxima a Damasco y con una población de 200.000 habitantes, se había convertido en un foco de rebeldes que habían atacado recientemente a las tropas de El Asad, que intenta sofocar desde hace 17 meses una rebelión que degenerado en guerra civil. Sobre la operación en la localidad, la agencia estatal de noticias Sana informó: "Nuestras heroicas fuerzas armadas han limpiado Daraya de restos de grupos terroristas que han cometido crímenes contra los hijos del pueblo, los han aterrorizado y han saboteado y destruido propiedades públicas y privadas".
La Agencia de la ONU para los Refugiados informó este viernes de que el número total de sirios refugiados en países extranjeros a causa del conflicto ha superado los 200.000. Según el OSDH, 25.000 personas han muerto en Siria desde el inicio de la revuelta contra el régimen, frente al cómputo de 18.000 que ofrece la ONU.
En el plano político, el vicepresidente sirio, Faruk al Shara, ha aparecido este domingo en Damasco por primera vez desde hace aproximadamente un mes, después de que en las últimas semanas se sucedieran los rumores sobre su deserción del régimen y su huida del país. Al Shara participó en una reunión con representantes del Parlamento iraní. Pocas horas después, el presidente El Asad reafirmó que su régimen derrotará "a cualquier precio" el "compló" extranjero dirigido contra su país, informó la agencia Sana. "El pueblo sirio no permitirá que el compló triunfe y alcance sus objetivos", y le derrotará "a cualquier precio", indicó el presidente sirio al recibir a un emisario iraní en Damasco, según Sana.
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