Raquel Alatorre Correa (C) , supuesta líder de la banda de mexicanos, asiste a una audiencia en Managua.
Associated Press
MANAGUA --
Las autoridades policiales de Nicaragua iniciaron la investigación
de una amplia red de colaboradores locales y regionales que apoyaron a
la banda de mexicanos que pretendían trasladar $9.2 millones hacia Costa
Rica.
El vocero de la Policía Nacional Fernando Borge dijo el lunes a The Associated Press que eldinero
decomisado a los 18 falsos periodistas mexicanos fue depositado en una
cuenta de la Corte Suprema de Justicia de Nicaragua, donde quedarán
resguardados para que cuando salga una sentencia definitiva pueda ser
distribuida entre las entidades que luchan contra el crimen organizado.
“Estamos en proceso de investigación a nivel nacional y regional, porque se trata de una banda con conexiones amplias”, señaló.
La banda, que se movilizaba en seis vehículos que hacían pasar como de la cadena Televisa de México y en los cuales transportaban el dinero, fueron capturados el 22 de agosto en la frontera con Honduras y están siendo procesados en Nicaragua por lavado de dinero y crimen organizado internacional. Antes habían pasado por Guatemala, El Salvador y Honduras.
Todos se encuentran encarcelados y el juez penal Julio César Arias estableció que la primera audiencia del juicio se realizará el 5 de septiembre.
“Todo el dinero pretendía ser llevado a Costa Rica para pagar un cargamento”, informó Borges quien indicó que en la prueba de detección de droga que le hicieron a los billetes dio como positivo cocaína.
Según Borge, la información policial indica que un ex agente de la Dirección de Seguridad del Estado de Nicaragua que se encontraba hospedado en el hotel Presidente Intercontinental en Honduras, donde también se hospedaban los 18 mexicanos, fue quien escuchó la conversación entre ellos sobre lo que pretendían hacer e informó a Managua.
Alertadas las autoridades nicaragüenses realizaron las coordinaciones con la Policía Nacional, Migración y la Dirección de Inteligencia del Ejército de Nicaragua, para esperar a los sospechosos en el puesto fronterizo Las Manos.
La jefa de la policíaAminta
Granera explicó que hay varias personas nicaragüenses retenidas en una
de las cárceles de Managua que al parecer están vinculadas a la célula
mexicana. No especificó cuántos son los detenidos ni ha querido vincular
a los 18 mexicanos con ningún cártel internacional del narcotráfico.
Granera admitió que la banda ya había entrado en otras ocasiones a Nicaragua, pero no quiso entrar en detalles sobre ello, para no entorpecer las investigaciones que continúan abiertas.
La banda de mexicanos liderados por una mujer de nombre Raquel Alatorre Correa, es defendida por tres abogados nicaragüenses contratados a petición de la cabecilla del grupo que se hizo pasar como Jefa de Información de los supuestos periodistas. Las investigaciones policiales indican que varios de los 18 mexicanos acusados son trabajadores de empresas privadas de seguridad de Tamaulipas y hasta un policía municipal deDurango .
Tamaulipas y Durango son dos estados del norte de México en donde las autoridades han reportado la presencia de carteles de las drogas como Los Zetas, uno de los grupos que ha extendido sus operaciones hacia Centroamérica.
El vocero de la Policía Nacional Fernando Borge dijo el lunes a The Associated Press que el
“Estamos en proceso de investigación a nivel nacional y regional, porque se trata de una banda con conexiones amplias”, señaló.
La banda, que se movilizaba en seis vehículos que hacían pasar como de la cadena Televisa de México y en los cuales transportaban el dinero, fueron capturados el 22 de agosto en la frontera con Honduras y están siendo procesados en Nicaragua por lavado de dinero y crimen organizado internacional. Antes habían pasado por Guatemala, El Salvador y Honduras.
Todos se encuentran encarcelados y el juez penal Julio César Arias estableció que la primera audiencia del juicio se realizará el 5 de septiembre.
“Todo el dinero pretendía ser llevado a Costa Rica para pagar un cargamento”, informó Borges quien indicó que en la prueba de detección de droga que le hicieron a los billetes dio como positivo cocaína.
Según Borge, la información policial indica que un ex agente de la Dirección de Seguridad del Estado de Nicaragua que se encontraba hospedado en el hotel Presidente Intercontinental en Honduras, donde también se hospedaban los 18 mexicanos, fue quien escuchó la conversación entre ellos sobre lo que pretendían hacer e informó a Managua.
Alertadas las autoridades nicaragüenses realizaron las coordinaciones con la Policía Nacional, Migración y la Dirección de Inteligencia del Ejército de Nicaragua, para esperar a los sospechosos en el puesto fronterizo Las Manos.
La jefa de la policía
Granera admitió que la banda ya había entrado en otras ocasiones a Nicaragua, pero no quiso entrar en detalles sobre ello, para no entorpecer las investigaciones que continúan abiertas.
La banda de mexicanos liderados por una mujer de nombre Raquel Alatorre Correa, es defendida por tres abogados nicaragüenses contratados a petición de la cabecilla del grupo que se hizo pasar como Jefa de Información de los supuestos periodistas. Las investigaciones policiales indican que varios de los 18 mexicanos acusados son trabajadores de empresas privadas de seguridad de Tamaulipas y hasta un policía municipal de
Tamaulipas y Durango son dos estados del norte de México en donde las autoridades han reportado la presencia de carteles de las drogas como Los Zetas, uno de los grupos que ha extendido sus operaciones hacia Centroamérica.
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