Una compañía de bebidas alcohólicas alemana ofrece un whiskey que supuestamente bañó el cuerpo de la modelo de Playboy Alexa Varga, en lo que seguramente es uno de los ejemplos más burdos de publicidad en la que el cuerpo de la mujer se objetifica mágicamente.
La mancuerna de mujeres semidesnudas y
bebidas alcohólicas es el truco más primitivo –y efectivo– que utilizan
las agencias de publicidad. En inglés se habla de la fórmula mágica:
“booze and boobs”, una aliteración y una fonética que revela un estadio
oral insuperado.
Apelando a esta zona reptileana del
cerebro humano, la compañía alemana G-Spirits ha llevado al extremo el
“poder de un par de tetas”, promoviendo su nuevo whisky como imbuido del
eros de la modelo hungara Alexa Varga. La compañía sostiene que “cada
gota” de su whisky de 180 dólares ha pasado por el cuerpo turgente de
esta modelo –haciendo énfasis en sus pechos– que fue nombrada Playmate
del año por Playboy Hungría.
Para probar que de alguna manera el
whisky contiene la esencia –el espíritu del splash– de esta sensual
modelo, los compradores solo podrán recurrir a la firma de Alexa y
quizás a algún tipo de percepción extransensorial que pueda manifestarse
en su libido.
Nuestros amigos del sitio Disinfo
traen a colación lo que dijo el comediante Bill Hicks de las personas
que se dedican a estos rubros: “Por cierto, si alguien aquí se dedica al
marketing o a la publicidad…date un tiro”. Hicks también había
imaginado un anuncio similar:
Here is the commercial they’d like to do, I guarantee you. We may see this one day yet but this is the ultimate television commercial
they want to do. Here’s the woman’s face, beautiful. Camera pulls back,
naked breast. Camera pulls back, she’s totally naked. Legs apart. Two
fingers right here, and it just says: “Drink Coke.” Now I don’t know the
connection but I’m drinking lots of fucking Coke.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario