Matanza de Tlatelolco: “Eran todo, menos unos incitadores”
Matanza de Tlatelolco: “Eran todo, menos unos incitadores”
Pepita, testigo presencial del inicio de la gresca entre la preparatoria Isaac Ochoterena y la vocacional 2, cuenta cómo vivió esos momentos
Arturo Páramo- 1
- 2
- 3
- 4
- 5
En la Plaza de la Ciudadela, escena de los inicios del conflicto entre los estudiantes y la policía.
No era para menos, porque el movimiento estudiantil más grande de los años sesenta en México, surgió de una mañana en que una decena de chicos de la preparatoria privada Isaac Ochoterena se reunió para desayunar molletes.
Los agresores de Adela y el 2 de octubre
Jorge Fernández Menéndez
Hace 44 años fueron asesinados en la
plaza de Tlatelolco decenas de jóvenes. Muchos otros terminaron en la
cárcel y se abrió una oscura noche en la vida del país que apenas
comenzaría a clarear con la reforma política que implementó varios años
después don Jesús Reyes Heroles. Fue una noche fruto de
la estupidez y la intolerancia, ejercida sobre todo contra los jóvenes
pero que, en realidad, buscaba atacar toda disidencia, todo pensamiento
alternativo a la vía única de una Revolución Mexicana que, como bien
había dicho Cosío Villegas unos años atrás, ya había muerto.
¿Y la iglesia? ¿Qué hace la Iglesia católica?
¿Y la iglesia? ¿Qué hace la Iglesia católica?
Con la educación y las finanzas a salvo, ¿para qué descender a los problemas mundanos?
La posición de la Iglesia católica en la España actual presenta una fotografía contradictoria. Por un lado, su jerarquía continúa atrincherada en los enormes privilegios que en materias de educación y financiación heredó de la dictadura franquista y consolidó en la democracia. Por otro, una creciente proporción de ciudadanos ha abandonado las tradicionales prácticas religiosas, confirmando que ni siquiera en la católica España el catolicismo se ha mostrado inmune al proceso moderno de secularización.
Resulta muy significativo, a la luz
de esa fotografía contradictoria, que la parte poderosa y dominante de la
Iglesia, ante el
descrédito de la política y el empobrecimiento y desprotección de
un amplio sector de la población causados por la crisis, no reaccione como una
fuerza de integración. Quizá nuestra historia más reciente ayude a explicarlo.
La jerarquía eclesiástica nunca
creyó en los valores de la soberanía popular, el fortalecimiento de la sociedad
civil y de las libertades democráticas.
Por eso hoy es más una fuerza de fragmentación que de unión.
AMLO y Peña: frente a frente
AMLO y Peña: frente a frente
Martín
Moreno
En el fondo, es una jugada de alta precisión de López Obrador. ¿Quién le impediría el acceso institucional a la casa del poder bajo el cargo de presidente del partido político Morena, o Regeneración Nacional, o como vaya a llamarse? Nadie.
De por qué nueve de cada diez delitos no se denuncian
De por qué nueve de cada diez delitos no se denuncian
Carlos Puig
El viernes pasado en la noche, a mi amiga Carla, productora de radio, le vaciaron su automóvil en Tlalpan. Un cristalazo. Una computadora, el iPod, un disco duro portátil, en fin.Desde ese momento Carla ha utilizado su cuenta en redes sociales para ir contando a lo que se ha enfrentado queriendo hacer todo por las buenas.
Esa misma noche se fue al Ministerio Público a levantar su denuncia —no sin antes intentar hacerlo por internet, cosa que fue imposible—, el trámite en la delegación tardó más de tres horas e incluyó, como en película mala, al personal del Ministerio Público fumando en la oficina, echando una botanita nocturna y pidiendo que todo se le repitiera cuatro veces. Esa noche no sucedió nada.
Otra vez “los musulmanes”
Otra vez “los musulmanes”
Fernando Escalante Gonzalbo
Otra vez estamos, y con el mismo motivo, en la discusión sobre Occidente y Los Musulmanes. Y las posturas son igual de obtusas hoy que hace un año, y dos y tres —porque no hay manera de decir nada sensato cuando se sacan a desfilar las mayúsculas, y se olvida que no hay más que política, de un lado y otro. Más o menos rústica o elaborada: política.
El problema es que a fuerza de dar vueltas cualquiera se marea, y se termina admitiendo casi cualquier cosa. Los hay que aprovechan para exigir que se imponga el respeto a las religiones, y se castigue la blasfemia. Los hay que piden, en cambio, que se levante la veda, y que efectivamente no haya límites para la libertad de expresión. Abusivos, tramposos, oportunistas, unos y otros.
Fernando Escalante Gonzalbo
Otra vez estamos, y con el mismo motivo, en la discusión sobre Occidente y Los Musulmanes. Y las posturas son igual de obtusas hoy que hace un año, y dos y tres —porque no hay manera de decir nada sensato cuando se sacan a desfilar las mayúsculas, y se olvida que no hay más que política, de un lado y otro. Más o menos rústica o elaborada: política.
El problema es que a fuerza de dar vueltas cualquiera se marea, y se termina admitiendo casi cualquier cosa. Los hay que aprovechan para exigir que se imponga el respeto a las religiones, y se castigue la blasfemia. Los hay que piden, en cambio, que se levante la veda, y que efectivamente no haya límites para la libertad de expresión. Abusivos, tramposos, oportunistas, unos y otros.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario