¿Y cuántas divisiones tiene Josefina?

Francisco Garfias

Dicen sus más cercanos ex colaboradores que Josefina Vázquez Mota ni se encarta ni se descarta para contender por la jefatura nacional del PAN. Agregan, eso sí, que la ex candidata presidencial del PAN “ya está más cerca de las definiciones”.

La incógnita planteada me hizo recordar la Cumbre de Yalta y las palabras de Stalin cuando Winston Churchill le comentó la posible incorporación de la Iglesia católica a las famosas conversaciones en las que los triunfadores de la Segunda Guerra Mundial dividieron el mundo en bloques. 

El soviético le respondió al británico con una pregunta: “¿Y cuántas divisiones tiene el Papa?”

Josefina no tiene grupo. No es calderonista. Mucho menos del Yunque. Ya no se diga maderista. En otras palabras: no tiene tropa. Tampoco posibilidades.

 ■Ni duda cabe que el presidente Enrique Peña Nieto quiere marcar distancia con su predecesor en la estrategia para disminuir la violencia que emana del ineludible combate al crimen organizado. En la ceremonia de instalación de la Comisión Intersecretarial para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, celebrada ayer en Aguascalientes, dejó claro que pondrá énfasis en la prevención social, sin descuidar, faltaba más, el uso legítimo de la violencia. Y es que, para decirlo en palabras de la alcaldesa de Aguascalientes, Lorena Martínez, “prevención sin control es ingenuidad”.

 ■Peña se hizo acompañar a esa entidad de ocho secretarios de Estado, siete de los cuales nada tienen que ver con el gabinete de seguridad: Luis Videgaray, Hacienda; Rosario Robles, Sedesol; Emilio Chuayffet, Educación; Ildefonso Guajardo, Economía; Alfonso Navarrete Prida, Trabajo, y Jorge Carlos Ramírez Marín, Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano.  El octavo es Miguel Osorio Chong, secretario de Gobernación. Encabeza la Comisión y es responsable de los lineamientos y acciones para implementar y articular políticas de prevención de la violencia y la delincuencia.

Un noveno, Gerardo Ruiz Esparza, titular de SCT, es parte del equipo de prevención, pero no estaba en el pódium.

Todos ellos están obligados a coordinarse y contarán con un presupuesto de 118 mil 801 millones de pesos para implementar los programas de prevención. En lo inmediato hay dos mil 500 millones para las 57 demarcaciones con altas tasas delictivas. Van algunas incluidas en el plan: Juárez, Acapulco, Culiacán, Saltillo, Tijuana, Chihuahua, zona metropolitana de la Laguna; zona metropolitana de Cuernavaca; zona metropolitana de Monterrey, las delegaciones de Iztapalapa y Gustavo Madero, en el DF; los municipios de Ecatepec y Neza, Estado de México; Morelia, Uruapan, Durango, Ciudad Valles, San Luis Potosí, Puebla…

 ■Vimos muy sonriente al gobernador de Chihuahua, César Duarte. Le preguntamos sobre la ausencia de los integrantes del gabinete de seguridad en el mencionado acto. “Si se revuelve todo se corre el riesgo de no hacer nada”, respondió el presidente de la Conago.

Otro gobernador en el podio, Carlos Lozano, de Aguascalientes, fue también crítico con la estrategia de Calderón: “No basta el combate frontal. Hay que entender las causas profundas”.

El subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana, Roberto Campa, fungió como maestro de ceremonias. El hombre ha trabajado duro en el Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia. Le preguntamos por qué no se incorporaron los integrantes del gabinete de seguridad al acto. Respondió con inusitada franqueza: “Lo policiaco se come todo…” El gobierno federal fletó un avión de invitados que llenó con representantes de ONG, algunos columnistas y encuestadores. María Elena Morera, Marcos Fastlicht, Luis Wertman, Edna Jaime, Elena Azaola, imposible nombrarlos a todos.

 ■Uno de los mandones en San Lázaro vaticinaba hace poco que si le hacían cambios a la minuta sobre la Ley de Amparo, ésta sería congelada en el Senado. Modificaron ayer el texto para que los casinos no puedan acceder a la llamada “suspensión”, que les permite operar mientras se resuelve el juicio de amparo. Así han funcionado. 

Las modificaciones a la minuta, paradójicamente, le dan un respiro a los concesionarios que explotan los llamados bienes de la nación. Ya tenían la soga al cuello. Las fracciones XI y XIII del artículo 129, que les impide recurrir a la famosa suspensión, fueron aprobadas en sus términos. El regreso de la minuta al Senado, donde el PRI y el PVEM no tienen mayoría, permitirá a los concesionarios de bancos, telecomunicaciones, minas, energía, transporte federal, entre otros, ganar tiempo.

Traduzca en apellidos las concesiones en todos estos rubros y mida el tamaño del broncón que asoma. 

 ■La “tregua” que otorga el regreso de la minuta al Senado se refleja en la serena propuesta de Tristán Canales durante la sesión del Consejo Directivo de la CIRT, que él preside: analizar con “serenidad y profundidad” la Ley de Amparo. Los consejeros lo aceptaron.

Canales dejó de lado la belicosidad y aseguró que la CIRT hará una defensa proactiva de sus legítimos intereses. “Lo haremos por los cauces indicados, sin confrontarnos con la autoridad”, aseguró. En donde no deben estar contentos es en las oficinas del ministro de la Corte, José Ramón Cossío. Él es uno de los que con más ahínco ha empujado la famosa Ley de Amparo.