19 mayo, 2011

Otra derrota del PRI

Otra derrota del PRI

Azules y amarillos reeditarán en Nayarit una historia que les dio muy buenos resultados en Guerrero, uno declinará a última hora.

Ricardo Alemán

Es muy probable que la noche del próximo 3 de julio el PRI pierda un cuarto gobierno estatal en tan sólo 18 meses, luego de que en julio de 2010 fue derrotado en los estados de Oaxaca, Puebla y Sinaloa.

Y el cuarto gobierno estatal perdido es el de Nayarit, en donde se cuece un potaje que en el pasado resultó veneno puro para los tricolores. Es decir, que hoy compiten contra el candidato del PRI —Roberto Sandoval Castañeda— dos aspirantes surgidos de las filas del PRD —una de ellas doctorada en el difícil arte del trapecismo político— que al final de cuentas sumarán sus candidaturas y sus votos para vencer al tricolor.

Hablamos, por un lado, nada más y nada menos que de Martha Elena García —esposa del ex gobernador Antonio Echevarría—, quien junto con su esposo militó por años en el PAN, luego saltó exitosamente al PRD y hace semanas regresó al partido azul, para convertirse en la candidata opositora que puntea las encuestas.

Y en el otro bando, en el partido amarillo, aparece el ex dirigente y líder eterno en su natal Nayarit, Guadalupe Acosta Naranjo, quien trató de imponer su candidatura, lo que provocó que “la señora gobernadora” —como se le conoce a Elena García— brincara al PAN, en donde fue recibida con los brazos abiertos. ¿Por qué los azules le aplaudieron su regreso? Porque podría hacer el milagro de sumar un gobierno estatal más al PAN. Pero vamos a los detalles.

A la luz de las más recientes encuestas, cualquiera podría suponer que en la elección para renovar el gobierno de Nayarit —3 de julio próximo—, el candidato del PRI, Roberto Sandoval Castañeda, tiene el triunfo en la bolsa, ya que aventaja con 49% de las preferencias a la candidata del PAN, Martha Elena García, quien tiene 33% de las simpatías, en tanto que el ex presidente del PRD, Acosta Naranjo, va en tercera posición con 17% de la intención del voto. ¿Pero, qué creen?

Pues nada, que azules y amarillos reeditarán en Nayarit una historia que les dio muy buenos resultados en Guerrero, en donde uno de los partidos contrincantes del PRI declinó de última hora a favor del otro candidato opositor, con lo que se llevaron la victoria. Es decir, se llevó a cabo una alianza de facto entre el PRD y el PAN, lo que le dio la victoria al más aventajado de los candidatos de esos dos partidos.

En el caso de Nayarit, el jefe Chucho, Acosta Naranjo, declinará de sus aspiraciones al gobierno estatal, a la mitad de la carrera, una vez que se haya consolidado la candidatura de su ex compañera de partido y hoy panista, Martha Elena García. El llamado “paso de la muerte” electoral incluye, como es lógico, que Naranjo llame a sus seguidores —en realidad al PRD, PT y Convergencia— a votar por la candidata panista, con el argumento de que la señora García es perredista, pero que para tumbar al PRI, debió saltar al PAN.

Todo está listo en el nuevo circo que nos ofrecerán los amarillos y los azules. Están a punto los payasos, los trapecistas, los expertos en el “salto de la muerte electoral”, lo mismo que los domadores de fieras y los engañabobos. Y, en medio del espectáculo, la mayor gracejada será la de hacerle creer al “respetable” que el PAN y el PRD son la mejor propuesta de gobierno, que sus diferencias no le importan a nadie y que lo importante es echar al PRI, para que lleguen gobernadores limpios, impolutos, ejemplares, como el pillo desvergonzado de Ángel Aguirre en Guerrero, quien nunca dijo a sus electores que en la tarjeta “La Cumplidora” incluía el nepotismo a niveles de escándalo.

Pero, además de que resulta indefendible el gobierno aliancista de Guerrero, un pequeño detalle podría despertar a los nayaritas. ¿Qué cosa? Casi nada, que la candidata Martha Elena García ya gobernó el estado, cuando su esposo, Antonio Echevarría, era el mandatario formal. Y gobernaron tan mal que regresó el PRI. ¿Ese es el cambio que propone la alianza PAN-PRD en Nayarit? ¿Qué tal?

EN EL CAMINO

El lunes 23 de mayo —a las 13 horas, en el auditorio Flores Magón de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM— se presenta el libro Neopresidencialismo mexicano, Enrique Peña Nieto frente al 2012, del periodista Enrique Olivares. El autor propone el regreso del PRI, con Peña Nieto… Y, a propósito, en tanto Peña Nieto promete no hacer campaña a favor de Eruviel Ávila, resulta que Marcelo Ebrard será el principal promotor de Alejandro Encinas, incluso en horas de trabajo. ¿No es como el mundo al revés? ¡La izquierda mexicana!

Fe de erratas: En la columna de ayer aparece: “…el fenómeno electoral y mediático que convirtió a Cárdenas en aspirante presidencial competitivo en julio de 2008…”, por supuesto, debe ser 1988.

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