Al abatimiento de Nazario Moreno González (El Chayo) -líder máximo del cártel La Familia ultimado a manos de las fuerzas del gobierno en diciembre del 2010- quedó como líder Jesús Méndez Vargas (El Chango). Con él rompieron Enrique Plancarte (El Kike) y Servando Gómez Martínez (La Tuta) para fundar Los Caballeros Templarios.
En los primeros meses del 2011 se produjeron enfrentamientos entre integrantes de estos dos grupos. El gobierno habla de haber aniquilado a La Familia después de la captura por la Policía Federal (PF) de Méndez Vargas (El Chango) el 21 de junio de este año.
Los hechos indican que el poder de La Familia ha estado pasando a Los Caballeros Templarios que, formalmente, nacen en marzo del 2011. De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), éstos utilizan los mismos niveles de violencia y métodos de trabajo que caracterizaron a sus antecesores.
El centro del negocio sigue siendo vender cocaína y metanfetaminas en Estados Unidos. El cártel tiene presencia en los 12 estados en los que antes operó La Familia: Michoacán, Estado de México, Distrito Federal, Jalisco, Guerrero, Aguascalientes, Tamaulipas, Guanajuato, San Luis Potosí, Querétaro, Morelos y Tlaxcala. Se ubican también en Estados Unidos.
La nueva organización privilegia como parte de su estrategia, según la SSP, acciones de propaganda contra el gobierno, poniendo énfasis en la crítica a sus aparatos de seguridad, a los que acusa de violar los derechos humanos. Contempla también que puestos de elección popular a nivel local queden en manos de gentes afines.
El Ejército incautó recientemente documentos en un campo de entrenamiento del cártel que revelan la ideología y mística con la que pretende manejarse el grupo. La simbología utilizada es la propia de los caballeros de la época medieval (cascos, capas con cruces).
En las regiones rurales del estado han repartido el “Código de los Caballeros Templarios de Michoacán”, que lleva la leyenda: “Esta lucha es por tu gente, por mi gente, por nosotros mismos y por nuestras futuras generaciones”. En el texto se propone que su misión es: “Proteger a los habitantes y al territorio sagrado del estado libre, soberano y laico de Michoacán”.
La forma de operar del grupo y el discurso que difunde en los territorios donde se mueve dejan ver que es el mismo planteamiento con el que surgió La Familia, de la cual (El Kike) Enrique Plancarte y (La Tuta) Servando Gómez Martínez -ahora dirigentes de Los Caballeros Templarios- fueron fundadores.
De acuerdo con la información de los aparatos de seguridad del gobierno, se puede afirmar que La Familia no fue aniquilada, como lo aseguró el vocero de Seguridad del gobierno, Alejandro Poiré, sino que sólo se transformó en una nueva organización que hereda lo construido por la anterior. (Próximo: El Cártel del Golfo)
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