Turquía lleva a cabo pruebas militares conjuntas con China mientras anula las que realizaba con Israel; la cooperación se palpa también en contratos de venta de armas con Irán comprando a China principalmente misiles de alta tecnología.
Los Estados Unidos e Israel están viendo con preocupación la creciente cooperación militar entre Turquía, China e Irán, especialmente después de un ejercicio conjunto de la fuerza aérea de Turquía y China la semana pasada.
Hasta hace dos años, Israel fue el principal socio de Turquía para el entrenamiento de combate aéreo.
En 2001 la fuerza aérea turca inauguró un centro de la guerra aérea táctica en Konya con Israel y los Estados Unidos.
Hasta 2008, la Fuerza Aérea de Israel era un invitado frecuente en el cielo de Turquía y un participante regular en el gran ejercicio anual del país, Aguila de Anatolia.
A raíz de la Operación Plomo Fundido y el consiguiente deterioro de las relaciones bilaterales, Turquía el pasado año revocó la participación de Israel en las maniobras. Los Estados Unidos decidieron no participar en el ejercicio de este año, porque causa de esa decisión. Un número de otros miembros de la OTAN siguieron el ejemplo.
Turquía sustituyó a la Fuerza Aérea de Israel por la de su homólogo chino. China envió aviones de combate Sukhoi SU-27 y pilotos para entrenar con F-16 de Turquía. En el pasado estos ejercicios se llevaron a cabo en público, pero la semana pasada se llevaron a cabo en secreto, con sólo un breve informe que apareció en los medios de comunicación turcos después del ejercicio.
Occidente ha estado observando los cambios en la estructura del ejército chino, y sobre todo ejercicios de largo alcance navales y aéreos que indican la intención de Pekín de adquirir la capacidad para llevar a cabo la guerra lejos de las fronteras de China.
Los chinos también están persiguiendo agresivamente equipamiento para la ciberguerra, empleando a alrededor de 60.000 hackers, según informes de inteligencia extranjeros.
El gobierno de Obama protestó la cooperación militar de Turquía con Irán después de que se informó de que los aviones de combate chinos fueron enviados a Turquía a través de Pakistán e Irán.
El desarrollo de relaciones entre Turquía, Irán y China se reflejan también en acuerdos de armas, con Irán comprando a China, principalmente la tecnología de misiles.
El C-802 de misiles antibuque lanzados por Hezbolá en la Segunda Guerra del Líbano en el barco de la Armada de Israel con misiles Hanit fue fabricado en Irán con tecnología china.
China también ha desarrollado un sistema de lanzamiento de misiles tierra-tierra junto con Turquía. El primer ministro chino, Wen Jiabao, tiene previsto visitar Ankara este mes para firmar varios acuerdos de cooperación bilateral.
Turquía y China también están involucrados en proyectos de construcción de tuberías de petróleo a través de Irán.
Otra razón de las estrechas relaciones entre los dos estados es que China, como miembro permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, ha estado a la vanguardia de la oposición a la imposición de sanciones más duras contra Irán en relación con el programa nuclear del estado islámico.
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